Los presidentes de Bolivia, Evo Morales, y de Perú, Ollanta Humala, se encontraron en el Cusco, capital histórica de Imperio de los Incas, adonde el mandatario boliviano partió el jueves, acompañado de sus dos hijos, para una visita oficial.
Morales y Humala se entrevistaron en la capital imperial del Tawantinsuyo, a 3.400 m de altura sobre el nivel del mar, sede de la imperecedera cultura de los quechuas andinos.
Antes de declinar en el incidente de Tumbes, aquel
fatídico 1533, el Tawantinsuyo, dominado por la cordillera de los Andes,
se expandió por los actuales territorios de Bolivia, Perú, Ecuador,
Chile y Argentina.
Se trata del tercer encuentro bilateral de ambos mandatarios (en la
Paz, en junio el primero y Lima, en julio, antes de la investidura de
Humala), esta vez en la ciudad insignia de la resistencia de los indios
andinos el siglo XVI a la colonización española y centro del poder del
penúltimo Inca, Huáscar, medio hermano de Atahuallpa, antagonista de
aquél y último de la estirpe de Pachacutec.
Avido de sostener un encuentro epidérmico con la historia del
quechua Imperio de los Incas (siglos XV y XVI) Morales se entrevistó por
cerca de una hora con Humala en la Capital Antigua del Perú, como se
conoce a Cusco, cerca de donde se encuentran las ruinas de Machu Picchu,
que el gobernante boliviano visitará y que recién fueron descubiertas a
fines del siglo XIX.
Morales, que invoca permanentemente en sus discursos a Túpac Katari,
líder de los indios aymaras alzados en rebeldía contra el poder de
Madrid, el siglo XVIII, conocerá, junto a sus hijos, especialmente
Evaliz, flamante bachiller en Humanidades, la historia de otro rebelde,
Túpac Amaru, que ofreció la última resistencia a las tropas del español
invasor Francisco Pizarro, en Vilcabamba, en 1577.
"Hemos sido una sola nación" antes del desembarco de los españoles
en Tumbes, en 1533, cuando Atahuallpa abdicó y capituló ante 400
pizarristas montados en caballos, pese a liderar un ejército de 40.000
soldados, sostuvo el mandatario boliviano de origen quechua aymara
durante una conferencia de prensa que dictó junto a Humala.
De bolsillo propio y a título particular, Morales había planificado
pasar las Navidades junto a sus hijos en Cusco, por la concentración
histórica que parece apasionar al gobernante boliviano, mas los
servicios bolivianos de seguridad e inteligencia recomendaron no viajar
sin la seguridad propia de un jefe de Estado.
El gobierno de Perú aprovechó el viaje de Morales y sus dos hijos
para que se haga una visita oficial, refirió una fuente del Palacio
Quemado.
En el encuentro, Morales y Humala repasaron la agenda bilateral,
antes de dictar una conferencia de prensa y jugar un partido de fútbol.
Se trata de dos mandatarios en permanente estado de forma física.
Todos los derechos reservados Copyright 2007
Terminos y usos del sitio
Directorio Web de Argentina
Secciones
Portada del diario | Ediciones Anteriores | Deportes | Economia | Opinion|Policiales
Contactos
Publicidad en el diario | Redacción | Cartas al director| Staff