El presidente uruguayo, José Mujica y el vicepresidente, Danilo Astori, acordaron ayer impulsar un proyecto para rebajar dos puntos el IVA, luego que ambos dejaron en evidencia posiciones divergentes al respecto durante el fin de semana.
El proyecto, una de las propuestas electorales del Frente Amplio, coalición de izquierdas en el gobierno, implica la rebaja desde 22% a 20% en el Impuesto al Valor Agregado (IVA) para el consumo con tarjeta de crédito, al tiempo que será devuelto en su totalidad para las personas pobres.
El acuerdo llegó tras una reunión entre Mujica y Astori y
tras abrirse una polémica que se sumó a otras discusiones
internas en el Frente Amplio y que afloraron este año al momento
de discutirse diversos proyectos de ley.
Mujica había decidido frenar una baja generalizada en el
impuesto y planteó al Frente Amplio discutir otra reforma
impositiva que favorezca a los hogares más pobres, iniciativa
sobre la que Astori y otros dirigentes, incluso afines al
presidente, se enteraron por la prensa.
El mandatario dijo que prefería mantener la tasa básica del
IVA en 22% y destinar los recursos a "repartir entre los más
pobres", lo que puede ser "bajarle mucho más a ellos y el resto
que siga pagando como ahora", en declaraciones realizadas el fin
de semana al diario El Observador.
La iniciativa de Mujica consistía en reducir cinco puntos
porcentuales el IVA para el 30% más pobre de la población en
todos los productos, no solamente los comprendidos en la canasta
básica del Ministerio de Desarrollo Social.
El presidente consideraba que su propuesta era fundamental en
el cumplimiento de la promesa del Frente Amplio de eliminar la
indigencia y reducir la pobreza a la mitad.
También la rebaja de dos puntos en el IVA es una promesa
electoral de la coalición y según Astori, "es una prioridad de
la agenda legislativa para 2012".
"Me enteré de esta posición del presidente por la nota de El
Observador y me sorprendió mucho porque nunca lo había planteado
ni al ministro de Economía (Fernando Lorenzo) ni a mí", sostuvo
Astori.
El vicepresidente agregó que "nosotros lo expusimos hace más
de tres meses en el Consejo de Ministros y nunca recibimos
objeciones o comentarios de su parte".
Las divergencias entre Mujica y Astori en materia tributaria
volvieron a poner de manifiesto dos visiones existentes en el
gobierno respecto al rumbo de la política económica.
Mujica pretende darle a su gobierno un "giro a la izquierda"
con medidas específicas que beneficien a los sectores más pobres
y que aumenten la carga fiscal sobre los estratos altos,
mientras que Astori, si bien comparte esos objetivos, prefiere
no innovar en materia tributaria y garantizar la credibilidad de
la política económica y la confianza de los inversores.
El último tema en el que aparecieron diferencias en la
cúpula del Poder Ejectuvo fue un proyecto para aumentar los
impuestos a las superficies grandes de tierra, una idea de
Mujica que no convencía a Astori, pero sobre la que finalmente
acordaron y se discute ahora en el Parlamento.
Las dos visiones sobre la política económica, llevó también a
que aparecieran dos vertientes en el equipo de gobierno, como
son el ministro de Economía, Fernando Lorenzo y el presidente
del Banco Central, Mario Bergara, afines a Astori por un lado, y
el asesor presidencial y ex viceministro de Economía, Pedro
Buonomo, y el director de la Oficina de Planemiento y
Presupuesto, Gabriel Frugoni, cercanos a Mujica, por otro.
El equipo económico participó la semana pasada de un foro empresarial, aunque no se realizaron anuncios de importancia, precisamente según entienden algunos analistas, para evitar poner sobre la mesa aquellos puntos donde existen divergencias internas.
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