El gobierno de Brasil suspendió las actividades de perforación de la empresa petrolera estadounidense Chevron, responsable por el derrame de crudo en alta mar, en un yacimiento que opera en la Cuenca de Campos, frente a las Costas de Rio de Janeiro.
La medida de la Agencia Nacional de Petróleo (ente regulador) suspende toda la operación de Chevron en el país, que opera en el Campo de Frade, a 370 kilómetros de la costa de Rio de Janeiro, hasta que se aclaren los motivos del derrame de crudo ocurrido el 7 de noviembre.
La ANP acusó a la empresa de "negligencia" en la perforación
que causó el derrame de unos 400 mil litros de crudo y también
en la elaboración del plan de emergencia.
Poco antes de esta sanción, el presidente de Chevron, Peter
Buck, pidió, ante el Congreso, "disculpas" al pueblo y al
gobierno de Brasil por el derrame de unos 400 mil litros de
crudo que le valió multas y acusación de fraude en informaciones
por parte de las autoridades.
"Tenemos un profundo respeto por Brasil, por el pueblo, por
las instituciones y las leyes. Estamos pidiendo disculpas al
pueblo y al gobierno brasileño. Queremos que no se repita ni en
Brasil ni en el mundo", dijo Buck ante la Comisión de Medio
Ambiente de la Cámara de Diputados.
La firma fue multada de inmediato en 30 millones de dólares por daño ambiental.
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