22/09/2011 - Un día como hoy pero de 1957

Nacían las 62 Organizaciones Peronistas

En el fracasado congreso normalizador convocado por el interventor militar, capitán de navío Alberto Patrón Laplacette, integrado por los representantes de los gremios del cual deberían surgir las nuevas autoridades de la CGT, 62 organizaciones gremiales cuyos dirigentes militaban en el peronismo, reunidos en Asociación de Trabajadores de la Sanidad, conforman un bloque separado de otras 32, que manejadas dirigentes socialistas y radicales. Las “62 organizaciones” se constituirán en el brazo político del sindicalismo peronista. Artículo Sindicalismo y Política. Escribe Ghilini. VIDEO

62 ORGANIZACIONES:  SINDICALISMO Y POLÍTICA 

Por Horacio Ghilini*  

Acostumbrábamos encontrarnos a almorzar casi todos los meses. Yo lo aprovechaba con la ansiedad de discípulo porque entre relato histórico y anécdotas, siempre me regalaba una reflexión, un proverbio, una máxima de conducción. En verdad, tenía un consejero de lujo, el “más lúcido” al decir del propio Perón y qué mejor que transmitirle a uno de los fundadores de las 62 organizaciones mis inquietudes políticas. 

Como siempre, Miguel Gazzera llegó puntual y como siempre pidió filet de merluza con puré. Miguel era un hombre metódico y disciplinado, un hombre de “una sola mujer, un sólo peronismo y una sola CGT” como le gustaba decir. A pesar de pertenecer a generaciones distintas, me sentía cómodo con sus posturas y verdaderamente disfrutábamos de nuestra amistad. 

Ni bien el mozo trajo el agua con gas y el vino, le espeté sin anestesia: “Miguel, ¿usted cree que hay que reflotar las 62 o tenemos que hacer una construcción distinta?”

 Ante una pregunta tan directa, él anteponía a la respuesta dos advertencias “yo aconsejo, no decido. El dirigente sos vos” y “no te olvides que somos distintos”. Luego desarrollaba su relato histórico y para este caso su visión de que en la historia del sindicalismo y no sólo en Argentina, la relación entre gremialismo y política siempre había sido tensa y conflictiva. 

“Corría el año 1956, la dictadura de Pedro Eugenio Aramburu e Isaac Rojas puso en vigencia el decreto 4.161 que proscribía al peronismo; proscrito el partido, intervino los sindicatos y llegó a prohibir cualquier mención oral o escrita de Perón. El capitán de navío Patrón Laplacette es nombrado interventor en la CGT. Por sugerencia de los llamados gremios `democráticos´, encabezados por Antonio Scipione, de Ferroviarios, afiliado a la UCR, se convoca a la normalización de la Confederación General del Trabajo, con los gremios adheridos. Al comprobar el interventor que la mayoría de gremios eran peronistas (62 contra 32) intenta dejar sin quórum el congreso pero éste sigue sesionando y se constituye en expresión del movimiento obrero cobrando cada vez mayor protagonismo político y sindical” 

 “Con el peronismo proscripto y la CGT intervenida, el centro de la escena paso a las 62 organizaciones”, me dice finalmente Miguel. Con esta forma elíptica me invitaba a que mi inquietud del comienzo fuese contrastada en la actualidad preguntándonos en qué estado encontramos hoy al peronismo y a la CGT a los efectos de adecuar a “estos tiempos” el viejo dilema de sindicalismo y política. 

Sin lugar a dudas las 62 organizaciones tuvieron su momento de gloria y fueron el instrumento esencial para el retorno del general Perón como hecho estratégico de la clase trabajadora. Como a todo instrumento, se lo debe juzgar por su eficacia. “La política se mide por los resultados” nos decía Perón. 

La actualización doctrinaria nos obliga, a 55 años de su fundación, a no sólo conmemorar sino más bien a reflexionar y a tener apertura creativa para canalizar un eje central, un principio permanente del movimiento obrero peronista: los trabajadores no podemos reducir nuestra acción a un reivindicacionismo amarillo ni ser polea de transmisión de un partido político. Los trabajadores debemos protagonizar la política y ser artífices de nuestro propio destino. 

* Integrante del consejo directivo de la CGT