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Brasil vivió una agitada jornada bursátil

Brasil vivió un jueves de "montaña rusa" en sus mercados, impactados por los efectos de la crisis europea y estadounidense, que derrumbó 4,83% el índice Bovespa y llevó al dólar a un nuevo aumento del 3,5%, cotizado a 1,91 reales.

El Banco Central, contra todos los pronósticos, intervino con 2.700 millones de dólares en el mercado futuro con contratos swap para frenar la devaluación del real, cuando el dólar llegó a venderse al mediodía por 1,96 reales.

Desde Nueva York, la presidenta Dilma Rousseff dijo que la actitud del gobierno es de "calma y de tranquilidad" y sostuvo que el país está "preparado" para enfrentar los embates de la crisis.

También afirmó que la volatilidad "proviene de la inestabilidad externa" y pidió una solución para la crisis griega.

El índice Bovespa de la Bolsa de Valores de Sao Paulo cayó 4,83% a los 53.280 puntos.

Si bien la bolsa y la tasa de cambio acompañaron el movimiento mundial, el dólar disparó al mayor valor de julio de 2009. Y en lo que va de setiembre acumula una suba del 19%.

Desde junio de 2009 el Banco Central no intervenía para frenar la devaluación e hizo 55 mil contratos de swap en el mercado futuro cuando el dólar se cotizaba a 1,96 reales.

La presidenta Rousseff afirmó que el Banco Central continuará evitando volatilidad en la tasa de cambio mediante los contratos a futuro.