05/09/2011 - Salud

Instan a los hombres a involucrarse en la educación sexual responsable

El ginecólogo y obstetra chileno Aníbal Faúndes aseguró ayer que para disminuir los embarazos no deseados y los abortos inseguros es necesaria la educación en sexualidad que involucre a mujeres y hombres y afirmó que los varones deben jugar un papel de mayor protagonismo en el debate sobre derechos sexuales.

 “Hay que hacer educación en sexualidad responsable, y esa educación tiene que ir a los hombres, no sólo a las mujeres”, dijo en diálogo con Télam, al ser consultado sobre las estrategias posibles para disminuir los embarazos no deseados y los abortos inseguros.  

Los hombres “tienen que construir más con la anticoncepción porque por ejemplo, en países de América Latina, la vasectomía es casi inexistente, cuando es una operación simplísima y no tiene ningún efecto secundario”, dijo. 

“Los hombres tienen un papel importante que no están jugando como deberían”, aseveró. 

Faúndes coordina el programa “Iniciativa para la prevención del aborto inseguro” de la Federación Internacional de Ginecología y Obstetricia (FIGO) que se implementa en 43 países, incluyendo Argentina. 

“Discutimos la situación del aborto en cada país y junto a las sociedades de obstetricia y aliados institucionales del Gobierno creamos y promovemos la instalación de programas de acción para la prevención del aborto inseguro”, explicó. 

Para el especialista en derechos sexuales “mantener al aborto criminalizado es ineficaz, injusto y trae graves consecuencias para la salud de las mujeres”. 

El programa que Faúndes desarrolla en FIGO se basa en cuatro estrategias y la primera apunta a determinar “cómo disminuir los abortos y embarazos no deseados a través de la educación en sexualidad responsable y acceso a la anticoncepción”. 

La segunda es la prevención secundaria “que se aplica cuando no se puede evitar que el aborto sea seguro y eso significa cambios en la legislación y el acceso al aborto dentro de los límites de la legislación actual”. 

Otra de las estrategias contempla que, cuando se produce la interrupción del embarazo “la mujer sea atendida adecuadamente en hospitales públicos sin ser discriminada” y finalmente “la anticoncepción post aborto para prevenir la repetición del aborto”. 

Faúndes señaló que en los países de Latinoamérica “en distintas medidas, existen estos cuatro componentes en los planes de acción y en base a estos puntos es que estamos tratando de avanzar en cada país”. 

La Cámara de Diputados de la Nación fue el lugar elegido para que el médico presente la primera edición argentina del libro “El drama del aborto. En busca del consenso” (Paidós) que escribió en 2005 junto a su colega José Barzelatto, durante un encuentro organizado por Católicas por el Derecho a Decidir de Argentina. 

En el Parlamento ya se efectuaron dos audiencias públicas convocadas por la Comisión de Legislación Penal para avanzar con la discusión en torno de la despenalización de la interrupción voluntaria del embarazo. 

En marzo de 2010 se presentó ante el Congreso el proyecto de la Campaña Nacional por el Derecho al Aborto Legal, Seguro y Gratuito que cuenta con el apoyo de representantes de distintos partidos: desde el oficialismo hasta el PRO, pasando por la Coalición Cívica, el GEN, Proyecto Sur, Nuevo Encuentro, la UCR, y el Partido Socialista, entre otros bloques. 

La iniciativa consta de 11 artículos, y establece que “toda mujer tiene derecho a decidir la interrupción voluntaria de su embarazo durante las primeras 12 semanas del proceso gestacional”. 

Además, contempla que la interrupción voluntaria del embarazo debe ser gratuita en los servicios públicos de salud, como también en el sistema de obras sociales y prepagas. 

Según el obstetra chileno, su libro “se utilizó mucho, por ejemplo en Colombia, durante el debate sobre inconstitucionalidad de la ley que mantenía criminalizado el aborto, y se sigue usando para vencer las resistencias de algunos sectores, particularmente de colegas ginecólogos y obstetras”. 

"Hay un gran malentendido en torno al aborto, porque no existe el dilema de estar a favor o en contra. Yo estoy en contra del aborto, pero también estoy en contra de condenar a una mujer porque no vio otra solución en su vida que interrumpir el embarazo”. (Télam)