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AMPLIARCerro Rico tiene hundimientos

Paralizan la extracción de minerales en Potosí

La extracción de minerales en la cima del cerro de Potosí se paralizará por primera vez en 545 años de explotación por el peligro de colapso total del principal yacimiento de plata de Bolivia y uno de los mayores del mundo.

El gobierno ordenó la suspensión de las operaciones mineras por encima de los 4.400 metros de altitud del cerro, ubicado en el sur del altiplano andino y cuya imagen figura en el escudo de Bolivia como símbolo de su riqueza minera.

El cerro Rico de Potosí es famoso desde de la época de la colonia como el yacimiento de plata más importante del mundo, con una altitud aproximada de 4.800 metros sobre el nivel del mar. La paralización de las tareas de explotación dejará sin lugar de trabajo a unos 700 mineros y fue decidida para estudiar medidas para preservar la estructura morfológica del cerro, declarado patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

Por las entrañas del cerro de forma cónica se entrecruzan miles de kilómetros de túneles a partir de las bocas de ingreso a unas 5.000 minas de las que se extraen minerales de plata desde la época de la colonia.

La mina más antigua, en explotación desde el año 1545, es Pailaviri, de propiedad del Estado, que está dividida en 17 niveles a los que se accede mediante un elevador que, de tres en tres metros, llega hasta los 240 de profundidad. En la cima del cerro se produjeron ya alrededor de 200 hundimientos de hasta 35 metros de profundidad y algunos de un radio de hasta 50 metros, según informes técnicos.

Debido a la gran cantidad de galerías que cruzan en todas las direcciones y de abajo a arriba la estructura del cerro "existe cada vez mayor fragmentación de la roca" y es mayor la posibilidad de fracturas" en toda su estructura.

Un colapso total "pondría en riesgo la vida de unos 15 mil mineros que trabajan cada día en sus entrañas, pues no existe capacidad de reacción oportuna para evitar una tragedia", explicó a Ansa el senador por Potosí, Eduardo Maldonado.

Al problema geofísico por el debilitamiento de toda su estructura "se suman las precarias condiciones de seguridad en que operan las cooperativas mineras", añadió Maldonado.

Según el ministro de minería, José Pimentel, existen cuatro zonas en las que es necesario suspender la explotación de minerales para "determinar en qué estado se encuentra la roca sólida".