Los ministros de Finanzas de Francia y Alemania analizaron este martes en París las medidas destinadas a reforzar la Eurozona, minada por la deuda pública, la tasa a las transacciones financieras y el déficit cero.
No trascendieron informaciones sobre el encuentro entre el francés François Baroin y su homólogo alemán Wolfgang Schäuble en el ministerio de Economía en la capital francesa, destinado a dar contenido a las decisiones adoptadas el 16 de agosto por el presidente francés, Nicolas Sarkozy, y la canciller alemana, Angela Merkel.
Lo más urgente de la agenda es la tasa a las transacciones financieras, cuyo proyecto debe ser sometido a sus homólogos europeos a principios de septiembre.
Pero la hoja de ruta esbozada por Merkel y Sarkozy es vaga, ya que no precisa ni la tasa ni los fines ni la extensión geográfica de la futura 'tasa Tobin", ni siquiera el calendario para su entrada en vigor.
Aunque este asunto también está en la agenda del G20 que preside Francia hasta noviembre, el debate sobre el destino de los futuros ingresos de esta tasa -- Estado, presupuesto europeo o ayuda a los países menos desarrollados-- todavía no está resuelto.
En la agenda de Schäuble y Baroin también estaba el déficit cero o el equilibrio presupuestario para evitar que los países gasten más de lo que tienen, lo que ha llevado a la crisis de la deuda actual.
Tanto Francia como Alemania quieren que figure en la Constitución de los 17 países de la Eurozona, pero países como Portugal han emitido sus reservas.
El debate es tanto político como técnico. El "freno al endeudamiento" en vigor en Alemania difiere de la "regla de oro" a la francesa, que tiene escasas posibilidades de que sea adoptada por el Parlamento debido al rechazo de la oposición de izquierda.
Sin embargo, España podría adoptar pronto esa regla. El presidente del gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, propuso el martes una reforma constitucional destinada a garantizar el déficit cero, lo que en principio cuenta con el apoyo del principal partido de la oposición.
Esta reforma permitirá "fortalecer la confianza de la estabilidad a medio y largo plazo en la economía española", dijo el presidente del gobierno español.
Otro punto de la agenda de los ministros de los dos principales países de la UE era la creación de un gobierno de la Eurozona, sobre el que no se han dado detalles.
Otro asunto que se ha colado en la agenda de los mandatarios europeos es el acuerdo firmado entre Grecia y Finlandia para que el país nórdico participe en el plan de ayuda acordado por los jefes de Estado y de Gobierno de la Eurozona el pasado 21 de julio.
Alemania, primera economía europea y máxima contribuyente al plan de ayuda a Grecia, no ha escondido su descontento por este acuerdo bilateral, que según las autoridades alemanas, debe ser aprobado por todos los socios.
En fin, menos urgente pero muy espinoso es el futuro impuesto a las empresas común en ambos países, con vistas a presentar propuestas a inicios del 2012.
También estaba previsto evaluar las amenazas que planean sobre la recuperación mundial, mientras el crecimiento de la economía ha sufrido un importante parón tanto en Francia como Alemania y en toda la zona de la OCDE.
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