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AMPLIARLos Autoconvocados de la Salud, tomaron, el Hospital Centro de Salud, esto produjo indignación a pacientes y familiares

Indignación de pacientes por protesta de Autoconvocados

Los Autoconvocados de la Salud, a modo de protesta, tomaron, ayer, el Hospital Centro de Salud, lo que generó la indignación de pacientes y familiares por el excesivo ruido. Los médicos aseguran que la responsabilidad es del gobierno. Alperovich dijo que a fines de marzo “ya le dimos un 33% de aumento, no le podemos dar más”.

Pareciera que esto no tiene límites. La situación se agrava pero nunca se termina. Los hospitales solo atienden emergencias desde hace tres años por la protesta de los Autoconvocados que, al parecer, solo terminará cuando el gobierno haga lo que ellos quieren. 

A fines de marzo hubo paritarias en Tucumán, de la cual el Sindicato de Trabajadores Autoconvocados de la Salud (SITAS) participó. Sin embargo, el día en que se firmaba el acuerdo, no fueron. Resultado, 33% de aumento en los sueldos, en el básico, en tres partes. Similar incremento se les dio al resto de las reparticiones del Estado. 

Desde entonces el conflicto se agrava más, pero la paradoja es que cada vez con menos apoyo de los trabajadores del SIPROSA. Solo basta ir a algunas de las marchas para corroborarlo. Ayer la situación se tornó lamentable. En asamblea el SITAS determinó como medida tomar el Centro de Salud, con pacientes internados, en repudio a la cantidad de policías, según dicen, represión. Se nota que ninguno de ellos tuvo participación activa en la resistencia a la dictadura, para afirmar semejante cosa. Ruidaje y tensión, propio de cualquier conflicto, desató la bronca de pacientes, familiares. 

El delegado de ese nosocomio, Carim Asus, dijo a los medios que la gente se desquita con ellos porque son la cara visible ya que los funcionarios son inaccesibles para las personas comunes. 

Lo cierto es que, la población en general, paga los platos rotos. Como siempre. Los pobres. 

Lo que no dice Asus es que en marzo las categorías A y B, es decir la de profesionales, lograron aumentos de entre 1500 a 1700 pesos, que la mayoría trabaja en dos o tres lugares más, que muchos de ellos no cumplen con las cinco hora de trabajo y, como si fuera poco, que en los últimos 50 años, nunca hubo tanto dinero destinado a infraestructura para la salud. 

Del otro lado, el gobierno no reacciona. Ayer, en declaraciones a la prensa, Alperovich dijo que "estamos dispuestos al diálogo” pero “para ser sinceros lo que no podemos es hablar de salarios porque ya les dimos un 33% de aumento a los médicos. No le podemos dar más, si esto sucediera, se tendría que aumentar a toda la administración pública y llegaríamos a no pagar sueldos". 

O sea, que dijo lo mismo que viene diciendo hace varios meses, o mejor dicho, desde que comenzó el conflicto. El gobierno debe tomar alguna decisión de fondo. Los hospitales no pueden continuar cerrados. El Estado debe garantizar la salud. 

Sebastián Ganzburg