20/07/2011 - En General

Desindustriaclización se agrava en Brasil

Brasil ingresó en proceso de desindustrialización, agravado por la penetración de productos chinos que puede causar la pérdida de 2,5 millones de empleos, según empresarios que denunciaron la "triangulación" de importaciones vía Argentina.

"El país está caminando hacia la desindustrialización, el gobierno no ha hecho nada" para impedir ese proceso, declaró el industrial Ivo Rosset, cuya empresa controla el 65 por ciento de la producción de telas en Brasil. 

    "La cuestión es si queremos o no queremos ser un país industrializado" y si no se toman medidas urgentes va a ocurrir como en Estados Unidos, donde hubo "un desastre en la industria automovilística", agregó.

    En esa misma línea, la Federación de Industrias de Sao Paulo (FIESP) alertó sobre el retroceso relativo de la producción fabril dentro del Producto Bruto Interno y denunció la "invasión" de productos chinos.

    La FIESP expresó su planteo durante un evento organizado junto a las mayores centrales sindicales, las cuales realizaron una concentración en el cordón industrial de Sao Paulo a principios de mes, cuando repudiaron la "pérdida" de empleos debido al aumento de las importaciones, favorecidas por la valorización del real que hoy se cotizaba cerca de 1,56 dólares.

    Empresarios y representantes de la Central Unica de Trabajadores prometieron dar continuidad a las actividades del "inédito" foro en defensa de la industria local.

    "Es grande la frustración de la industria textil ante la falta de políticas de apoyo que impidieron su expansión internacional, que fue aprovechada por Asia", dijo Flavio Castelo Branco, de la Confederación Nacional de la Industria (CNI).

    El representante de la CNI agregó: "corremos el riesgo de no aprovechar el crecimiento de la demanda interna", ocurrido en los últimos años con la expansión del mercado nacional y aumento del poder adquisitivo.

    "Los chinos entran (al mercado brasileño) con precios contra los que no se puede competir" y esto causó el cierre de varias fábricas, comentó Ivo Rosset, afiliado al oficialista Partido de los Trabajadores y amigo del ex mandatario Luiz Lula a Silva, que el lunes fue homenajeado en la FIESP.

    Según Rosset, los salarios industriales brasileños son del orden de los 1.000 dólares contra 100 en China, afectando la competitividad y puede derivar en la pérdida de 2,5 millones de empleos, así como la migración de empresas hacia China.

    "La desindustrialización de que se habla tanto no es tan real", dijo hoy el profesor de macroeconomía, Luiz Rossi, del Instituto Superior de Enseñanza y Pequisa de Sao Paulo.

    "La industria viene creciendo, aumentó la producción, la facturación y el empleo industrial, pero otros sectores crecieron más, como el de servicios, que está ganando más importancia relativa en el PIB", explicó Rossi.

    El Ministerio de Industria y Comercio Exterior ha reforzado las medidas anti dumping contra China y aumentó las tasas impuestas a algunos rubros, como el de calzados, pero esos paliativos no podrán revertir la tendencia, señala Rossi.

    "Es un hecho que los sectores de mano de obras intensiva como textil y calzados van a perder espacio frente a la competencia china, eso es prácticamente inevitable", observa el especialista.

    En tanto un grupo de empresarios denunció que China burla las medidas tarifarias enviando sus mercancías desde terceros países, y afirmaron que Argentina se presta a esas maniobras.

    "Están viniendo muchos productos" de Argentina que antes no eran exportados por ese país suramericano y "lo más probable es que sea una triangulación desde China", declaró Marco Antonio Peñas, ejecutivo de la fábrica de alto parlantes Arlen.

    Uno de cada cinco productos ingresados desde Argentina en 2011 es "nuevo" o sea no estaba en la pauta exportadora del país vecino en 2010, y esto es señal de que puede tratarse de "triangulación", indica un un estudio aparecido hoy en Estado de Sao Paulo.