Las presentaciones efectuadas ante el Congreso por los legisladores nacionales del radicalismo, José Cano y Norah Castaldo, con la finalidad de nacionalizar la polémica sobre la constitución de la Junta Electoral de la Provincia, fue rápidamente retrucada por el Diputado alperovichista Alfredo Dato, quien expresó que las presentaciones del radicalismo tienen como finalidad presionar a los jueces. Los dichos de Dato a su vez, no tardaron en generar reacciones en la oposición, dice Mariano Campero.
Viniendo de Dato, la definición de “libre juego de las instituciones” puede ser un concepto, además de peligroso, carente de toda ética. A pesar de que él crea lo contrario, la sociedad no se olvida que Dato renunció a la Corte Suprema al día siguiente de realizarse los comicios que él controló como Presidente de la Junta Electoral de la Provincia, para ser candidato a Diputado por el PJ.” Con estas palabras salió al cruce el presidente de la UCR de Yerba Buena, Mariano Campero.
Campero agregó que “con semejante precedente Dato no tiene autoridad moral para opinar sobre la constitución de la Junta Electoral. Quizás está intentando hacer méritos para obtener otro premio de Alperovich.”
Dato se habría referido también a la necesidad de esperar la intervención de la Corte provincial, la que deberá revisar la sentencia de inconstitucionalidad dictada por la Sala II de la Cámara en lo Contencioso Administrativo.
“Yo en su lugar evitaría opinar públicamente sobre ese tema. Parece no haber aprendido nada de las clases de escapismo que Alperovich da a diario”, ironizó Campero. “justamente lo que no queremos es que haya más “Datos” en los órganos que deben garantizar la transparencia de las elecciones”, concluyó.
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