El pasado 5 de mayo se realizó en Buenos Aires el Simposio Internacional de la Sociedad Argentina de Infectología Pediátrica, una puesta al día sobre infecciones respiratorias en pediatría. Se abordaron distintas temáticas vinculadas a la importancia de la inmunización de los niños y una de sus sesiones fue dedicada a la importancia de la vacunación antigripal.
Cada año, la gripe estacional causa una significativa morbi-mortalidad en todo el mundo.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) estima una incidencia anual de 1 billón de personas infectadas, 3 a 5 millones de casos de enfermedad severa, y entre 300.000 y 500.000 muertes en todo el mundo. La enfermedad es causada por el virus siempre mutante de la influenza, y la Organización Mundial de la Salud (OMS) recomienda que toda persona con un alto riesgo de complicaciones severas por la enfermedad sea vacunada anualmente.
Todas las personas son susceptibles de infectarse con el virus de la influenza, sin embargo los denominados “grupos de riesgo” son aquellos que de contraer la enfermedad, corren un mayor riesgo de sufrir complicaciones. Desde el Ministerio de Salud de la Nación, la inmunización antigripal se recomienda fuertemente a este grupo que incluye a: niños de 6 meses a 24 meses de edad, embarazadas, mamás de niños menores de 6 meses, personal de salud (todos ellos incluidos en el calendario nacional de vacunación); mayores de 65 años y personas de 2 a 64 años con enfermedades crónicas (respiratorias, cardíacas, renales, diabetes, obesidad mórbida). Las próximas cuatro semanas son claves para vacunar al 80% de estos grupos de riesgo antes de iniciar el invierno.
Especialmente en el caso de los niños, la Campaña Nacional de Vacunación Antigripal incluye la inmunización obligatoria y gratuita de: embarazadas (en cualquier trimestre de la gestación), puérperas (madres de niños menores de seis meses), donde la inmunización de la madre llega también a los niños; y aquellos niños desde los 6 hasta los 24 meses. A partir de esta edad se recomienda la vacunación antigripal de los niños sólo con factores de riesgo. “Es muy importante que se haya logrado introducir el binomio madre-hijo en el programa de vacunación, es decir, vacunar no sólo a los chicos de 6 a 24 meses sino también vacunar a las embarazadas y puérperas con hijos menores de 6 meses. Es importante además que la gente vea que la vacunación es un derecho y no un deber.” afirmó el doctor Eduardo López, Presidente de la Sociedad Argentina de Infectología Pediátrica (SADIP).
Según datos mundiales, las muertes por influenza aumentan cada año, “desde el año 2006 al año 2009 (durante la pandemia de influenza), comparado con los 5 años previos, se observa que las muertes por influenza se han cuadriplicado, especialmente en la población pediátrica” afirmó la doctora Alejandra Gaiano, Coordinadora Científica del programa nacional de inmunizaciones del Ministerio de Salud de la Nación. “Si analizamos el estudio nacional de caracterización clínica de casos hospitalizados fallecidos por el virus de influenza A/H1N1 durante el 2009, del Ministerio de Salud de Nación se puede observar que los más afectados fueron los niños entre cero y nueve años y del total de niños menores de 5 años fallecidos por Influenza A H1N1 durante la pandemia, el 70% eran menores de 2 años, la mayoría de ellos con factores de reisgo asociados.” agregó.
“En la época no pandémica el 10 por ciento de los niños que ingresaban al Hospital de Niños tenían virus de influenza confirmado, alrededor de 80 niños por año, si esta cifra se replica en el resto de los hospitales pediátricos, es un indicador de que la cifra es muy alta” agregó el doctor López.
La vacunación es la forma más eficaz de prevenir la infección y por esto desde este año la vacuna antigripal se ha incorporado en el Calendario Nacional de Vacunación, es importante que la población demande la vacuna, así como también que el personal de salud promueva la vacunación. En el caso de los niños, a diferencia de otros grupos, es importante resaltar que hasta los 9 años, deben recibir 2 dosis. “Este año los pediatras tenemos un doble desafío ya que tenemos que lograr cumplir con el esquema de las 2 dosis. Tenemos la responsabilidad de, por un lado, bajar la carga de la enfermedad y por el otro, evitar los efectos indirectos que tiene esta enfermedad” afirmó López.
Los niños sin vacunación antigripal previa se deberán aplicar 2 dosis con un intervalo mínimo de 4 semanas, así como aquellos que el año pasado se inmunizaron con vacuna antigripal monovalente (1 o 2 dosis). Sólo quienes recibieron 2 dosis de vacuna antigripal trivalente en cualquier momento de su vida podrán recibir una sola dosis. “Es muy importante completar el esquema de las 2 dosis en los menores de 9 años así como cumplir con la inmunización de todas las vacunas incluidas en el calendario nacional de vacunación” concluyó Gaiano.
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