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Proyecto para limitar venta de tierras a extranjeros

Uno de los anuncios formulados por la presidenta Cristina Fernández de Kirchner en la inauguración de las sesiones ordinarias del Congreso tuvo que ver con la extranjerización de la tierra, respecto de lo cual anticipó entonces el envío de un proyecto. Ahora volvió sobre el tema.

Lo hizo al encabezar en el Luna Park el acto en el que se presentó la Corriente Agropecuaria Nacional y Popular (CANPO). Allí anunció que enviará al Congreso un proyecto de ley de tierras para "cuidar la jurisdicción de la tierra y para que siga siendo de la República Argentina".

Tal cual lo había hecho el 1° de marzo, Cristina Kirchner aclaró que "de ningún modo el proyecto tendrá un sesgo xenofobia, porque simplemente vamos a tomar los ejemplos de otros países donde se respeta los derechos adquiridos, pero se defiende el patrimonio sin tantas vueltas".

Cristina explicó que la iniciativa "será para cuidar la jurisdicción de la tierra, para que siga siendo de la Argentina".

En su mensaje, la presidenta no obvió la mención del conflicto con el campo que atravesó la Argentina en 2008, cuando "se vivió uno de los momentos institucionales más difíciles de que se tenga memoria en la vida democrática del país por los poderosos intereses concentrados que tuvimos que enfrentar", sostuvo, afirmando que "jamás se había vivido lo que se vivió en el país; de agresividad innecesaria. Cuando uno tiene razón no hace falta la agresividad, sólo hace falta levantar la voz para que otro pueda escucharlo".

Dijo la presidenta que "queremos un campo para muchos, una nueva ruralidad, donde sus pequeños y medianos productores puedan asociarse e introducir nuevamente el cooperativismo", y remarcó que algunos productores se quedaron en su lugar de origen "no se vinieron a Puerto Madero a hacer un edificio corporativo".

Asimismo afirmó que "necesitamos hacer un cambio estructural" con "un campo para muchos, donde sus pequeños y medianos productores puedan asociarse e introducir el cooperativismo como una de las armas mas formidables".

En otro pasaje, la presidenta reclamó también al Congreso "que apruebe el proyecto que consagra los derechos del trabajador rural", recordando que ese proyecto fue elevado en 2010 para que los trabajadores del campo "ejerzan su labor en condiciones dignas, con lo que tendrán además un compromiso mucho más grande con lo que hacen y generarán más producción".

Habló de "nueva ruralidad", y de "un cambio estructural" en el sector que permita que los "pequeños y medianos productores puedan asociarse e introducir el cooperativismo como una de las armas más formidables".