La comunidad diaguita de la localidad catamarqueña de Andalgalá, pidió a la Corte Suprema de Justicia de la Nación que ordene el cese de la actividad minera a cielo abierto en el yacimiento de Agua Rica, por los “daños ambientales” que aseguran que produce.
En un pedido de amparo contra el gobierno catamarqueño, que autorizó la explotación, el pueblo originario denunció la “contaminación del aire, agua, suelos, vegetación y daños en la salud de los habitantes de la región”.
En el yacimiento de Agua Rica se extraen oro, cobre y molibdeno, para lo cual se usan solventes “altamente tóxicos” y, según la denuncia, el propio informe de la minera admite “la producción de daños ambientales”.
La acción de amparo es contra la provincia de Catamarca “por cuanto a través de sus órganos, dictó la resolución que allanó el camino para que se agrave la contaminación del medio ambiente", señala la presentación. (Télam)
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