La estela del calendario maya que ha sido interpretada erróneamente como un anuncio del fin del mundo en diciembre de 2012 fue presentada el martes a la prensa en Tabasco, al sureste de México.
La piedra caliza y esculpida con martillo y cincel está incompleta, y en lo poco que se aprecia, "en ningún lado dice que en ese año se va a acabar el mundo", dijo en conferencia José Luis Romero, subdirector del Instituto Nacional de Antropología e Historia en Tabasco.
En la piedra está escrita la fecha 23 de diciembre de 2012, lo que provocó un rumor sobre que los mayas predecían en ella el fin del mundo, alimentado con la película estadounidense "2012", que se refiere al supuesto apocalipsis.
En lo poco que se lee los mayas se refirieron a la "llegada de un señor de los cielos, en coincidencia con el cierre de un ciclo numérico", dijo Romero. La fecha grabada en la piedra se refiere al Bactum XIII, que significa el inicio de una nueva era, insistió Romero.
La estela número seis del Tortuguero, está catalogada como un atractivo turístico mundial para el estado de Tabasco, y que será exhibida hasta el 2012, cuando abra sus puertas el Museo Regional de Antropología "Carlos Pellicer Cámara".
En rueda de prensa la directora del Instituto de Cultura, Norma Cárdenas Zurita, aseguró que el programa de turismo nacional que iniciará el próximo año denominado "Mundo Maya 2012", servirá para atraer turismo mundial, y gestionar con la Secretaría de Turismo 25 millones de pesos para concluir la obra civil.
"El inmueble está muy viejo y han surgido nuevas necesidades, el techo está en estado deplorable y es necesario una inversión mayor a la que se tenía prevista anteriormente", aceptó la directora, por lo que sólo la restauración total del techo tendrá un costo de 30 millones de pesos.
Por su parte Juan Antonio Ferrer, delegado del centro INAH de Tabasco, dijo que Tabasco es ahora el centro de atención del mundo gracias al monumento número 6, legado de la cultura Maya, y que por lo pronto estará guardada hasta poder ser mostrada al mundo.
Aclaró, ante el cuestionamiento de los reporteros respecto a las profecías, que la lectura epigráfica no dice que se vaya a terminar el mundo, más bien señala que viene la llegada de un nuevo ciclo, de un nuevo señor, del dios Bolom Yocté, quien está representado en un cartucho jeroglífico. "El que digan que en la pieza se maneje que se vaya a terminar el mundo es una cuestión de mercadotecnia, de venta, porque realmente la pieza no dice tal cosa".
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