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AMPLIARA partir de las 9.30 se reanudará el juicio por la causa Romero Niklison

En la última audiencia se escuchará a Ruckauff y los alegatos

El juicio por la causa Romero Niklison entra en su etapa final. En la jornada de hoy el ex ministro de Isabel y vicepresidente de Menem prestará testimonio por el sistema de videoconferencia desde Buenos Aires. Mientras que las partes realizarán los alegatos. Desde la querella y fiscalía pedirán la pena máxima para Menéndez y Albornoz, con cumplimiento efectivo en cárcel común.

A partir de las 9.30 se reanudará el juicio por la causa Romero Niklison, donde Menéndez y Albornoz están acusados como los responsables directos del operativo ocurrido el 20 de mayo de 1976, cuando en la casa de calle Azcuénaga 1816 fueron asesinados cinco militantes montoneros.

A penas se reabra la audiencia se escuchará, por el sistema de videoconferencia, el testimonio del ex ministros de Trabajo de Isabel de Perón y vicepresidente de Menem, Carlos Ruckauff. Tiempo después las partes harán sus respectivos alegatos.

“Consideramos que se dio por probado nuestra postura de que lo ocurrido no fue un enfrentamiento, sino un fusilamiento donde todavía hay restos que no se entregaron a sus familiares”, dijo la querellante, María Alejandra Romero Niklison, hija de una de las víctimas y abogada en la causa. En este sentido, recalcó que pedirán la pena máxima en cárcel común, "lo cual consideramos fundamental", expresó la letrada.

Un juicio diferente

Como estaba previsto el juicio duró un mes. A diferencia de los dos anteriores que se hicieron en Tucumán, es decir la causa Vargas Aiganasse y Jefatura de Policía, en este proceso hubo mucho más contenido emocional que político. Además todo el proceso anterior a la instancia oral se realizó en Santa Fe, donde viven la mayoría de los testigos, y por supuesto, la querella.

No faltaron situaciones incómodas para algunos de los involucrados en el debate, como el caso del juez López, quien integraba el Tribunal. Luego de que fue denunciado por participar en delitos por crímenes de lesa humanidad, más precisamente, por haber estado en salas de torturas, presenciando esas conductas inhumanas. Esto hizo que se excusara de continuar participando y su lugar lo tomó el cuarto juez, Pérez Villalobo.

El magistrado, oriundo de Córdoba se destacó al realizar preguntas interesantes a los testigos. Logrando, en muchos casos, obtener declaraciones que ni el fiscal, querella o defensa pudieron sacarle a los testigos. Fue criticado por Menéndez. Lo cual no es novedoso, ya que este juez integraba el Tribunal que condenó a este genocida, junto con Videla a prisión perpetua en cárcel común.

De esta manera, el juicio va llegando a su final. Hoy los querellantes jugarán sus mejores cartas con una serie de fundamentos que reflejen que lo ocurrido ese día fue una masacre. Mañana el Tribunal dictaminará la condena. No se espera otra cosa que la pena máxima en una cárcel común, teniendo en cuenta lo aberrante de los delitos.

Sebastián Ganzburg