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AMPLIAREmpata con sabor a nada en el Monumental

El Negro no puede y Atlético no gana

"En las malas soy el responsable y las buenas son de los jugadores. Somos los primeros en querer ganar", decía Hrabina al final del partido que Atlético Tucumán empató, 0 a 0, con Tiro Federal.Hrabina insultado por miles de decanos que estuvieron presenciando un aburrido encuentro de fútbol.

Mientras Cristián Chávez  siga buscando hacer un gol mejor que el de Córdoba, será difícil que el decano gane.

Hrabina insultado pero en el equipo hay muchos rèsponsables de lo mal que juega Atlético Tucumán. En el 2010 los triunfos tapaban esto, pero ahora no liga y el desajuste en la cancha es más notable.Culpas compartidas.

Ayer el conjunto dirigido por Enrique Hrabina ( algunos hinchas pidieron su renuncia) se encontró con un rival , con muchas pretensiones para rescatar un puntito, bien prolijo en todo los sectores de la cancha. Es cierto que Andrés Rebottaro jugó con línea de seis  por momentos, como lo hacen todos los equipos que llegan al Monumental. También es una realidad que el local no generó nada de nada. Centros más centros, pelotas llovidas e inoperancia en la creación. Fue un equipo sin ideas sin nadie que tranquilice el juego, pare la pelota y piense.

Cristián Chávez es un jugador diferente en la divisional, hábil, guapo,  encarador y  rápido, pero tiene la cabeza puesta en la tribuna. Juega para el y sus seguidores. Es un muy buen futbolista pero muy pocas veces juega al fútbol.

Sus compañeros tampoco anduvieron bien  y Atlético Tucumán terminó hundido en su impotencia.

El segundo tiempo  no fue distinto al primero con el agravante que Tito metió su equipo más atrás y Quique no encontró el camino para resolver esa situación.

A segundos del pitazo final el palo izquierdo de Ischuk salvó el empate. Esa fue la única acción de peligro,  fue el reflejo del partido. Atlético Tucumán con mucho desorden buscando desnivelar y Tiro Federal aguantando todo y de contra, Triste hubiese sido para los decas que esa pelota entrara, fue la única que llegó con peligro al arco del local.

El conjunto tucumano mereció ganar, le faltó claridad en los metros finales. Creó varias situaciones y falló en la definición, quizás por exceso de individualismo de quiénes o quién está para definir. Como siempre hubo una gran tarea de Omar Gallardo.

Los insultos a Enrique Hrabina están fuera de lugar. En el fútbol siempre la pasión es más fuerte que la razón  La impaciencia en el fútbol es aceptable pero la intolerancia no. Más allá que los espectadores tienen derecho a no aceptar los que no les gusta. El juego decano a lo largo de las 25 fechas nunca fue para creer que son los mejores. Antes la embocaba  ahora no.

Tampoco es para tomarla con el conductor a pesar que el dice “que se la recontrabanca y  que el resultado es responsabilidad de el. Esto es fútbol y cuando ganemos vamos a abrazarnos todos”.

Atlético Tucumán no perdió , sumó y sigue entreverado en los primeros puestos.

Daniel A. Villalba
villalbadaniel07@gmail.com