El santo tucumano que en líneas generales no mereció perder se quedó con las manos vacías. San Martín realizó un buen partido en Rafaela. El empate Hubiese sido justo. Terminó perdiendo por 2 a 1. Fernández puso en vantaja a los tucumanos; Bovaglio y Carignano le dieron el triunfo a la "Crema". Expulsados Pereira y el "Monito"
El partido tuvo un final accidentado, en un tumulto, Diego Ledesma fue lastimado en la cabeza por un policía.
Se puede decir un partido caliente no en el juego, sino lo que generaba la levantada en una cancha difícil, los dirigidos por Roldán a partir de los 10 minutos se pararon bien atrás con un mediocampo justo y necesario en quite y entrega, la seguridad de Julio López y los desbordes de los delanteros hacían que San Martín controlace el juego.
Poco a poco, Gustavo Ibañez comenzó a inquietar a los rivales. El árbitro, a instancias del línea, anuló un gol legítimo del "Ratón", Además no cobró una clara mano de Bovaglio dentro del área. Los ánimos estaban caldeados en todos los tucumanos que estaban en la cancha.
Ya en el segundo tiempo una falta del Ratón derivó en un tiro libre ejecutado por David Robles que fue rechazado por Guillermo Sara y Miguel Fernández, bien atento, convirtió para el Santo.
En la jugada del gol, tuvo mucho que ver Daniel Pereira, que distrajo marcas y tapó al arquero.
San Martín se puso a la defensiva después del gol, tratando bien la pelota, sin reventarla y jugándola con seguridad en los pies de Emanuel Centurión y Gabriel Bustos. Una defensa bien firme y con rápidas subidas de Luis Vega y Mario Vera.
Así fue durante 15 minutos. Roldán se equivocó al sacar de la cancha a David Robles que hasta ese momento era el dueño de su lateral, tanto en defensa como en ataque. Lucas Oviedo entró inseguro y descuidó el sector, permitiendo una escalada de Lucas Bovaglio y el empate del local.
Rafaela continuó desordenado pero vertical, y así se arrimó al arco de López. A 3 minutos del final de encuentro, Carignano recibió solo (una vez más) y ante la tardía salida del arquero visitante, definió bien y marcó el segundo gol de los santafecinos.
Esta acción generó una airada protesta de titulares, suplentes e integrantes de la delegación tucumana. En el tumulto, Diego Ledesma recibió un "palazo" policial en la cabeza.
Luego del bochorno, se fueron expulsados Daniel Pereira y Miguel Fernández, dos de los jugadores con mayor regularidad en el equipo de Roldán.
Final de todo. Victoria local por 2 a 1. Un espectáculo arruinado por una bandera mal levantada y un pito mediocre que derivó en una injustificada reacción de la gente de San Martín, que luego del pitazo final, continuaron con los reclamos que se extendieron hasta los vestuarios. Lamentable.
Daniel A. Villalba
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