La presidenta Cristina Fernández de Kirchner sostuvo ayer que se siente orgullosa "como ciudadana" de ser parte del "momento histórico de crecimiento más importante de la historia argentina", al inaugurar la autovía que une las ciudades de Santa Fe y Paraná.
"La verdad, me siento muy contenta de estar participando, como ciudadana, como una ciudadana que ha militado desde muy joven, por poder participar del proceso más importante de crecimiento, más importante de nuestra historia", afirmó la Presidenta.
Cristina recordó que en 1994, cuando era convencional constituyente
junto con Néstor Kirchner, "cruzábamos de Santa Fe a Paraná todos los
días y soñábamos con un país diferente, soñábamos con esta obra", y
reconoció que "jamás pensamos que años más tarde íbamos a venir a
inaugurar la ampliación de esta ruta, obra que él inicio cuando era
Presidente".
Mientras hablaba de esos recuerdos, la presidenta
fue interrumpida por el canto de los asistentes a la inauguración que
decían "Néstor no se murió, Néstor no se murió, Néstor vive en el
pueblo...", lo que motivo que se emocionara e interrumpiera por unos
segundos su discurso.
Cristina manifestó sentir "una inmensa
emoción y alegría al inaugurar esta obra, una autovía con una inversión
de más de 250 millones de pesos" y agregó que "es una obra estratégica
para Entre Ríos y Santa Fe, que ofrecerá seguridad vial y progreso".
En
otro de los pasajes de su discurso criticó a sectores dirigentes de la
oposición al sostener que "se es dirigente cuando se resuelven los
conflictos" y que "algunos creen que cuánto más duro se es, más se está
comprometido con el cambio, pero no es con discursos que se logra ese
compromiso".
"Eso es lo que aprendí de él (por Néstor Kirchner),
la responsabilidad. Sigan militando les pido a los jóvenes, yo veo a él
en la cara de cada uno de ustedes", concluyó.
Al hablar de los
logros de la gestión de gobierno adelantó que "la recaudación
tributaria, que se dará a conocer mañana, superó los 40.000 millones de
pesos en enero y alcanzó un nuevo récord".
"Este es un récord
histórico que se derrama en más coparticipación en derechos de
exportación, que compartimos en el Fondo Federal Solidario de la soja,
en lo que constituye una verdadera práctica de federalismo", expresó.
Promediando
su discurso pidió "responsabilidad al movimiento obrero, que sigan
defendiendo los intereses de los trabajadores, pero que no se olviden
que fue este gobierno quien recuperó las paritarias y aumentó varias
veces el salario mínimo".
En el mismo sentido, cuestionó con
dureza a las empresas "responsables del trabajo esclavo en el campo,
que está combatiendo en forma cotidiana el Ministerio de Trabajo", y
aseguró que "defender este modelo es cuidar los 5 millones de puestos
de trabajo recuperados por este gobierno".
Sobre el trabajo
esclavo por parte de empresas extranjeras, que se hizo público esta
semana, dijo que "es vergonzante para la dignidad humana y de una
Nación cuando uno ve algunas escenas, fotos, realidades como la de hoy,
en aquellas empresas que están ganando el dinero que nunca han ganado
en toda su historia".
La presidenta señaló también que "la
provincia (de Santa Fe) me pidió que pudiéramos intervenir en el
conflicto del Puerto de Rosario, y por eso vine aquí con (el ministro
de Trabajo, Carlos) Tomada, porque nos hacemos cargo de todos los
problemas".
"Esa es la tarea de quienes gobiernan; así me enseño
Néstor en los 20 años que estuvo a cargo del ejecutivo, tanto en el
municipio, como en la provincia o en la Nación", aseveró.
Cristina
también se refirió, sin mencionarlo directamente al conflicto con el
campo del año 2008: "los conflictos con posiciones a rajatabla no le
sirven a nadie; le sirven sólo a las minorías, ya lo vimos en otros
conflictos" "Recordemos cómo algunos se disfrazaron defendiendo a los
pequeños; y éstos hoy se dieron cuenta de que fueron utilizados",
remarcó en relación a las posiciones de la Sociedad Rural y de la
Federación Agraria en el tema de las retenciones a las exportaciones.
Participaron
del acto, del que Cristina fue única oradora, los gobernadores de Santa
Fe, Hermes Binner; y de Entre Ríos, Sergio Urribarri; el misnitro de
Planificacióm, Julio De Vido; su par de Trabajo, Carlos Tomada, y el
secretario general de la Presidencia, Oscar Parrilli.
Además,
asistieron los diputados nacionales Agustín Rossi y Gustavo Marconato,
la senadora Roxana Latorre y el titular de Vialidad Nacional, Nelson
Periotti.
La obra, sobre la ruta 168, forma parte del corredor
bioceánico central y conecta a Argentina con Chile, Brasil y Uruguay y,
en el ámbito nacional, es clave para la vinculación entre las
provincias de Santa Fe y Entre Ríos.
Además, contribuye en materia de seguridad vial y beneficiará el desarrollo económico-turístico- social.
Los
trabajos, realizados desde el río Colastiné hasta el acceso al túnel
subfluvial, consistieron en la construcción de una nueva calzada de dos
carriles sobre siete kilómetros, pavimentación de banquinas y
repavimentación de la anterior traza, con 1.600 metros de nuevos
puentes.
Entre los puentes nuevos se destaca el nuevo viaducto
sobre el río Colastiné, con 526 metros de largo, ejecutado con un
moderno sistema constructivo de empuje, una característica que lo ubica
como uno de los más extensos realizado en Sudamérica con esta modalidad.
También
se realizó la iluminación del tramo en obra, desde el río Colastiné al
acceso al túnel subfluvial, con columnas metálicas de diez y doce
metros de altura, en el cantero central, y en los puentes de ocho
metros, con más de 500 luminarias.
Las obras incluyeron el
tendido de la red para la provisión de la energía, desde la zona de
Colastiné, y abastecer adecuadamente el sistema de iluminación de la
autovía
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