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AMPLIAREn Ciencias Naturales se hicieron Segundas Jornadas Nacionales Abolicionista sobre Prostitución y Trata de Mujeres Niñas

La necesidad de penalizar a proxenetas, rufianes y tratantes

La abogada especialista en trata de personas, Magui Bellotti, disertó el viernes en las Segundas Jornadas Nacionales Abolicionista sobre Prostitución y Trata de Mujeres Niñas. “Se deben modificar los códigos contravencionales para eliminar la represión a personas en situación de prostitución”, agregó.

“Se eligió Tucumán para estas segundas jornadas porque es zona de circulación, de destino y origen de tratas de personas. Además porque existen prostíbulos encubiertos, como también los hay en todo el país”, expresó la abogada especialista en trata de personas, Magui Bellotti, quien disertó el viernes en las Segundas Jornadas Nacionales Abolicionista sobre Prostitución y Trata de Mujeres Niñas, que se realizan en la facultad de Ciencias Naturales de la UNT y finalizan el sábado.

“Nosotros vinculamos la trata de personas con el proxenitismo y rufianismo, o sea con la explotación de la prostitución ajena”, explicó la letrada.

En este sentido fue más a fondo y relató que “pese a que el país, a nivel internacional, adhiere al abolicionismo jurídico, en las provincias, incluso en Capital Federal, se persigue a las personas en situación de prostitución, en lugar de ser asistidas y generar condiciones económicas y culturales que les permitan salir de eso. Cuando la idea es no meterlas presas, ni aplicarles multas o perseguirlas”. Por lo tanto “se hace lo contrario a los compromisos internacionales”, destacó.

Los prostíbulos funcionan a la luz del día. “En algunas provincias incluso están habilitados. En unas pocas se los prohibió como en Santa Rosa de La Pampa, Villa María en Córdoba, Villa Nueva Córdoba, Gualeguaychu. Pero por lo general hay una enorme impunidad pese a que existe una ley nacional que prohíbe establecer prostíbulos. Esto se debe a una complicidad política y judicial”, indicó.

Respecto a los delitos de proxenitismo, rufianismo y trata, la especialista expuso que “observamos que cuando son menores de 18 años no hay problema porque el delito se configura por la realización de estas acciones con los fines de explotación. En cambio si es mayor de 18 hay que probar si hubo engaño, violencia, aprovechamiento de una situación de vulnerabilidad, si hubo una recepción de pago por parte de un tercero con autoridad sobre la víctima, entre otras cuestiones. Esto es igual para los casos de trata y proselitismo. Por eso lo que exigimos es la reforma de estos delitos para que siempre la facilitación de prostitución a una personas sea delito”.

En el caso de rufianismo, manifestó que “es peor porque no se distingue entre menores y mayores, en cualquier caso hay que probar si hubo violencia, engaño, etc”.

De esta manera, la Magui explicó que “es necesario hacer una reforma del código penal y de los códigos contravencionales, de estos últimos para eliminar la represión a personas en situación de prostitución. La modificación del código penal es fundamental para que efectivamente se penalice a proxenetas, rufianes y tratantes”.

Por ejemplo “en Santa Fe y Entre Ríos derogaron las figuras legales que persiguen el ejercicio de la prostitución en el caso de las personas, pero permanecen los códigos contravencionales para todo lo demás. Por lo tanto es necesario que se modifiquen para que sean democráticos”, opinó.

Proyectos de ley respecto a la trata de personas

Hay tres dictámenes en diputados, uno de mayoría, uno de minoría y otro de súper minoría. “Los dos primeros son, a nuestro juicio peor que el existente porque derogan los delitos de proxenitismo y rufianismo. Incorpora una figura genérica de explotación que es un cajón de sastres donde entra todo y donde entraría de forma indirecta la explotación de la prostitución ajena pero dentro de un delito de someter a explotación, o sea estamos de nuevo bajo la idea de probar las formas que produzcan el sometimiento. Pero estamos de acuerdo con el proyecto ultra minoritario que pertenece a la diputada de la Coalición Cívica, Marcela Rodríguez. A este partido también pertenece el proyecto de mayoría. También el proyecto de Stella Maris Córdoba (FPV) es muy bueno, con esto quiero decir que es un problema transversal a los partidos. En el de Marcela se incorpora la penalización de los prostíbulos y penalización de clientes de tratas”, informó.

Sebastián Ganzburg

sebaganzburg@gmail.com