12/09/2010 - En General

Se enfrentan dos propuestas diplomáticas en presidenciales brasileñas

La candidata presidencial brasileña Dilma Rousseff, oficialista, y su rival José Serra, representan dos proyectos opuestos de política exterior, la primera volcada hacia la integración regional y el segundo a las relaciones con Estados Unidos, afirmó Marco Aurelio García, asesor del presidente Luiz Lula da Silva en temas internacionales. Rousseff, del Partido de los Trabajadores (PT), demostró sus "coincidencias" con la política externa "exitosa del presidente Lula que como vector principal tuvo una fuerte prioridad hacia la integración regional", observó García en diálogo con ANSA.

El ex presidente Fernando Henrique Cardoso, del Partido de la Socialdemocracia Brasileña, ha expresado su temor por lo que pueda suceder si Rousseff es electa, pues la considera una simple "marioneta" de Lula que no tiene experiencia política ni roce internacional.

"Dilma no es una neófita, tiene una buena percepción de la política internacional", rebate Marco Aurelio García, quien es el principal consejero de política externa de Lula, y coordinador del programa de gobierno de la candidata a sucederlo.

García apunta que uno de los aspectos particulares de esta campaña hacia los comicios del 3 de octubre es el peso que ha ganado la agenda internacional, algo que no se observó en otros duelos preelectorales.

A lo largo de esta campaña Rousseff y Serra han polemizado sobre las relaciones de Brasil con Irán, Bolivia, Colombia, Venezuela y también manifestaron posiciones divergentes sobre el Mercosur.

El bloque suramericano ha sido defendido por la candidata quien se pronunció a favor de "avanzar" en la aproximación con los países de la región, y cuestionado por Serra, para quien ese organización a veces opera como un "lastre", que impide a Brasil firmar tratados de libre comercio unilateralmente con otros bloques, como la Unión Europea.

El Partido de la Socialdemocracia Brasileña y su candidato Serra defienden "tesis" de política externa que son semejantes en algunos puntos, a las contenidas en el Area de Libre Comercio para las Américas (ALCA), sostuvo García.

Al respecto recordó que durante el gobierno socialdemocrático del ex presidente Fernando Henrique Cardoso "se hicieron negociaciones" para que Brasilia se incorpore al ALCA, un proyecto "rechazado" por Lula da Silva y su discípula Rousseff, aseveró García.

Tanto el ex presidente Cardoso como el postulante Serra, mostraron ser favorables a una "mayor aproximación" con Estados Unidos y observan con "desdén" al Mercosur y Unasur, opinó García.

Una opinión similar a la de García expresó el canciller brasileño, Celso Amorim, durante una conferencia que pronunció ante militares europeos y estadounidenses en el Octavo Encuentro Anual Instituto de Estudios Estratégicos en Ginebra, Suiza.