Rubén Magnano, pieza fundamental de la generación dorada de nuestro básquet, hoy está en la vereda de enfrente y el martes puede ser verdugo de sus ex dirigidos cuando los enfrente por los octavos de final del Mundial que se desarrolla en Turquía.
Prefería no tener que enfrentar a la Argentina. No por una cuestión deportiva, sino por haber tenido tantas vivencias con el grupo en épocas de gloria”, manifestó el DT cordobés que comanda los destinos de los brasileños en declaraciones al sitio Globoesporte.
Igual, por si hiciera falta, aclaró: “Las cosas cambiaron y será una situación curiosa en mi vida. Voy a hacer lo posible para que gane Brasil. Es un objetivo muy importante llegar a los cuartos de final”.
Por su parte, su plantel se mostró confiado de cara al partido decisivo del martes. “Nuestra ventaja es que ahora tenemos a Rubén de nuestro lado. A los jugadores argentinos los conoce bien, su estrategia, y como juegan en los momentos decisivos. Conoce a Scola, al temperamento de cada uno”, aseguró Marcelinho.
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