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AMPLIARGran triunfo santo en Arroyito

En un "Arroyito" mojó Oreja

El marplatense consiguió el gol con el que San Martín de Tucumán derrotó a Rosario Central por 1 a 0. Ante unos 50 mil espectadores el santo tucumano en el estadio de Arroyito impuso su juego y se quedó con los tres puntos. Triunfo inobjetable que pone al equipo de Roldán en inmejorable ubicación.Broun le detuvo un penal a Herrera.

Además de la victoria San Martín de Tucumán mantuvo el invicto y estiró a más de 600 minutos el cero en su arco.

Fue el partido soñado por todos los cirujas.Triunfo de visitante ante el candidato mayor, sigue invicto, sin goles en contra y un juego sólido casi sin errores.Con más goles la perfección hubiese estado más cerca. Claro que hablamos de un campeonato de segunda división.Pero ahi están las evidencias de lo bien que anduvo San Martín frente a Rosario Central.

Los dirigidos por Carlos Roldán no se achicaron ni se inmutaron ante tamaño escenario. Una multitud alentando al conjunto de Reynaldo Carlos Merlo.Algunos cirujas entreverados sufrían callados.

Rosario Central salió a llevarse por delante a San Martín que lo esperó , buscando meter una contra que lo pusiera en ventaja. El canalla si claridad comenzó a ser controlado un juego colectivo y sereno que desplegaban los jugadores santos. Cerraban espacios, metiendo con fuerza , peleando cada pelota y cuando la conseguían salían con claridad por el lado de Pablo Cantero Este buscaba a Juan Casado que mostró solvencia cada vez que intervino. Pablo De Muner, cerraba todos los huecos y un gravitante Facundo Oreja ( su mejor partido en San Martín) que causaba problemas a la defensa local.

Sobre 21 minutos del primer tiempo un pase impecable de Juan Casado dejó a Facundo Oreja de espaldas al arco rival. El marplatense se dió vuelta y con un derechazo derrotó a Broun. 1 a 0 justo.

A partir de ese gol los rosarinos se vinieron con todo a buscar el empate pero el juego colectivo que hacía San Martín, con relevos,concentración, pelota al piso y algunos lujos, desconcertó al local y hasta pudo aumentar el marcado si hubiese aprovechado las 4 o 5 situaciones de gol que tuvieron los hombres del santo. A los 45 Broun cometió penal a Oreja. Nicolás Herrera se hizo cargo de la ejecución con un disparo leve y anunciado que fue contenido por el arquero canalla, que hasta ese momento era la figura de Central.

En el segundo periodo San Martín siguió ordenado, sólido y solo le faltó concretar la superioridad demostrada.

Los cambios realizados por Roldán sumaron refresco en el medio y en el ataque y terminó consiguiendo un gran triunfo ante uno de los candidatos para ascender a primera.

Daniel A. Villalba