Luis Pérez, quien se había encadenado ayer a una valla en la esquina de San Martín y 25 de Mayo, exigiendo que lo atienda el gobernador, fue detenido ayer por la policía cuando intentó hacer lo mismo. Hubo forcejeos, llantos e insultos de los transeúntes hacia los miembros de la fuerza de seguridad.
Alrededor de las 10, Luis Pérez fue arrestado cuando intentaba encadenarse nuevamente a una valla ubicada en 25 de mayo y San Martín. El hombre de 31 años ya había realizado esta medida ayer con el objetivo de que el gobernador, José Alperovich lo atienda para pedirle personalmente vivienda y trabajo para solventar su tratamiento contra las drogas.
La situación de ayer fue bastante trágica, entre forcejeos la policía lo detuvo. Esto causó el llanto de su mujer, quien lo acompañaba que hasta se orinó de la desesperación que no se lo lleven.
De esta manera Pérez terminó su protesta en la Comisaría 1ª. "Se tomó esa decisión porque se acercaron otras personas para actuar del mismo modo que Pérez", informó el comisario Jorge Alderete.
A esa hora, marchaban en Plaza Independencia las Madres del Pañuelo Negro, que tienen hijos adictos. A través del megáfono las mujeres expresaban su repudio a semejante medida.
Lo curioso es que minutos antes, en su contacto habitual con la prensa, Alperovich fue consultado sobre el tema y dijo que "la ministra de Desarrollo Social, Beatriz Mirkin, ya se encargó. Le dimos trabajo a su madre".
Sebastián Ganzburg
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