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Bolivia: Gobierno intenta desbaratar red de contrabando

El ministro de Economía y Finanzas, Luis Arce, aseguró ayer domingo que la nueva Ley de Aduanas que se debate en el Legislativo no ataca a los comerciantes sino a los contrabandistas que generan ilícitamente millonarias sumas de dinero que no benefician a Bolivia.

 Por ello, dijo, que este año se realizaron 300 operativos para enfrentar este delito en defensa de los intereses nacionales y captar recursos por la vía de los impuestos que sirvan para mejorar los sistemas de educación, salud y otros.

El Ministro anotó que no se justifican las marchas de protesta de los comerciantes y transportistas porque la norma no les afectará, sino a los magnates del contrabando que internan mercadería evadiendo el pago de impuestos.

Lamentó que exista una campaña de desinformación al interior de las bases de los comerciantes con la difusión de mensajes que no tienen relación con la Ley y que busca solamente provocar conflictos.

Arce reiteró que el Gobierno realiza una campaña de socialización de la Ley para evitar una manipulación que mantenga en apronte a algunos sectores que consideran que este instrumento legal perjudicará sus intereses.

Garantizó que la Ley, que ya recibió el visto bueno de la Cámara de Diputados, "no atenta contra el régimen simplificado ni la actividad del comercio".

La Ley pasó al Senado para su revisión y posterior sanción en el Órgano Legislativo antes de que sea promulgada por el presidente Evo Morales Ayma.

Arce resaltó que los empresarios privados apoyan no sólo el proyecto de Ley de Aduanas, sino la lucha integral contra el contrabando que encara la Aduana a través del Control Operativo Aduanero (COA) con el apoyo de las Fuerzas Armadas y la Policía Boliviana.

"Estamos protegiendo la industria nacional con estas medidas que generan recursos que serán utilizados en políticas sociales e infraestructura para mejorar la calidad de nuestra educación y salud", subrayó.

El Ministro resaltó que las instituciones del Estado trabajan en forma coordinada con el cruce de información para fortalecer la lucha contra el contrabando a través de la identificación de las operaciones ilícitas de grupos de contrabandistas con alto poder económico.

Dijo que en el pasado la Aduana Nacional fungía como la caja de partidos políticos, cuyos dirigentes se disputaban cargos en el entendido de que iban a recaudar ganancias para sus propios bolsillos.

Denunció que los sectores ilegales que se enriquecieron ilícitamente con el contrabando son los que precisamente desarrollan una campaña contraria a la aprobación de una Ley de Aduanas que sancione sus actividades.