El vicepresidente brasileño, José Alencar, denunció un "chantaje" para que reconozca la paternidad de una supuesta hija fruto de una relación con una enfermera en 1954.
José Alencar, de 78 años, reiteró que no se someterá a un examen de ADN, porque de hacerlo "mañana todo el mundo vendrá diciendo que tengo que hacerme otro, como una forma de chantaje, yo no estoy acostumbrado a ceder a los chantajes".
La Justicia ordenó al vicepresidente que reconozca como hija
a la profesora Rosemary de Moraes, de 55 años, en una causa
iniciada en 2001 en el estado de Minas Gerais, sudeste
brasileño.
Alencar es uno de los mayores industriales textiles de Brasil
y fue electo dos veces vicepresidente, en 2002 y 2006, en la
fórmula encabezada por el mandatario Luiz Lula da Silva.
Enfermo de cáncer desde 1996, Alencar admitió en la madrugada
de este miércoles que cuando "joven...frecuentaba una zona
bohemia" de Caratinga, interior de Minas Gerais, pero negó haber
mantenido una relación con la madre de Rosemary de Moraes.
"No hay ninguna persona que me haya visto con esa mujer", la madre de Rosemary, declaró en entrevista a un programa de la TV Globo.
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