El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, destacó ayer la paz que reina en la región de Sudamérica y el Mercosur, donde podemos tener "todos los defectos del mundo, pero hace muchos años que no estamos en guerra".
"Creo que Sudamérica y Mercosur hoy en día son ejemplo de cómo el mundo podría vivir en paz, sin armas nucleares, sin guerras y de manera mucho más armoniosa", sostuvo Lula en la cumbre del bloque regional, que se desarrolló en la capital sanjuanina.
"Nosotros no queremos guerras y si alguien quiere un lugar seguro para
vivir que aprendan de nosotros y miren para este continente: acá tenemos
todos los defectos del mundo, pero hace muchos años que no estamos en
guerra", añadió.
"Tenemos energía, petróleo, gas, oportunidades hídricas como ningún otro lugar del mundo", afirmó.
"Tenemos
todo lo que necesita el mundo para dar el ejemplo a los países ricos,
que si bien hacen discursos, quieren que subyuguemos nuestro desarrollo
para que nos ocupemos de cosas que ellos no cuidaron como el medio
ambiente", criticó.
Sin embargo, admitió que aún queda mucho por
hacer como por ejemplo "una gran política de innovación tecnológica para
que el Mercosur esté interconectado, y un desarrollo energético para
que cada invierno o verano no tengamos problemas de suministro".
Lula
resaltó hoy que la Cumbre de Jefes de Estado del Mercosur y Estados
Asociados de San Juan "fue la mejor después de la realizada en Ouro
Preto (2004) por el contenido y la calidad de las decisiones que fueron
aprobadas".
En su discurso, remarcó los progresos
"extraordinarios" del Mercosur y recordó cuando en 2002 durante su
campaña presidencial negó el ingreso de Brasil al ALCA "porque no había
ninguna propuesta condescendiente para Sudamérica, como sí la hubo con
la Unión Europea que ayudó a sus países más pobres para ponerse en pie
de igualdad".
"El ALCA era una proposición que no tenía la menor
intención de ayudar a que los países más pobres puedan ser cada vez
menos pobres y se transformaran mínimamente en competitivos en relación a
los países ricos", señaló.
Lula recordó que primero ganó las
elecciones él, "luego ganó Néstor Kirchner y dos años después ni
siquiera los Estados Unidos ni nadie más hablaban del ALCA".
Hacia
el final, se dirigió a la presidenta Cristina Fernández Kirchner y le
dijo que su presidencia pro tempore en el Mercosur, que finalizó hoy,
"fue extraordinaria" y ejemplificó que el documento firmado "es una
prueba cabal de los adelantos que hicimos".
Lula deseó que en la
presidencia que hoy asume "podamos avanzar un poco más", y que en las
próximas presidencias "se avance un poco más todavía hasta que el
Mercosur sea algo que nadie tenga la menor duda de que somos amigos en
la construcción de un bloque político, económico, social y cultural".
Asimismo,
resaltó la necesidad de "trabajar para que otros países entren en el
Mercosur para que nuestros pueblos puedan circular libremente y que
nuestras empresas se desarrollen construyendo alianzas".
Por
último expresó que "todos los países tienen el derecho soberano de hacer
acuerdos con quien quieran, pero pienso que los resultados económicos
del Mercosur prueban el éxito por sí solos".
"Basta examinar el
flujo comercial y ver los adelantos que hubo en materia de integración e
interacción política que hubo entre los compañeros gobernantes",
completó.
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