(Qué título malo). El Jardín de la República amaneció con un hermoso manto blanco de nieve(qué original soy )que cubrió gran parte de la provincia. Numerosos tucumanos salieron a caratear en los cerros, en medio de la nieve y se vieron situaciones y escucharon palabras muy graciosas. Claro yo también sufrí el frío en la Capital. Escribe un tucumano que no lo soporta.
“Ta refría la nieve”, decía un entrevistado al periodista televisivo ( este se tiraba en la nieve como si hubiese ganado un campeonato), que le preguntaba como se sentía con el fenómeno. “Taría buena que por lo menos esté tibia , que no”, le hubiese contestado.
Encima todos quieren hacer muñecos de nieve y termnian armando cada porquer´´ias sin forma y grotescas. Otros comienzan se acuerdan de Hyde Park ( New York, que tal yo), que vieron en una película vieja y comienzan a tirarse con puñados de nieve actuando como si estos fuesen bolas de nieve. Si lo único que sabemos tirar los tucumanos es la manga, bombuchas y la nieve de carnaval.
Ayer, a primera hora del día encendí radio, televisor , celular, MP3 y todo lo que tenía a mi alcance, menos una estufa porque no tengo, pensando que eso me daría algo de calor. “Ta loco el frío que hace”, pensé apenas desperté. Claro si las frazadas estaban en el piso y tenía la espalda helada. Abrí la canilla del agua caliente y salía fría ( seguro primo, si no tené calefón). Me preparé un feca bien calentito y tenía más ganas de echármelo en los pies que tomarlo. Para mejor no había pan y el almacenero que me fía no abrió temprano. Lo tomé bebido (obvio, si el café no se mastica.
Busque la ropa en el ropero y solo encontré, un anorak de los ochenta, una campera de tela vaquero que usaba en los setenta, saco para ponerse en setiembre, pullover de tela de llama , ese de los sesenta, medias con el escudo de Racing, un gamulán manchado y horrible y una remera, para usar de camiseta, que tiene grabado “Síganme los buenos”. ¿Viste?, es así uno cree que el frío no va llegar nunca y no gasta un mango en vestimenta de abrigo. El sobretodo, de la época del uno a uno, está lleno de agujeros con un olor a leña húmeda mezclada con polenta quemada ; asqueroso. Eso por no poner unas monedas en antipolillas y algo que ahuyente la humedad. Terrible lo que me esperaba. Pensé -Si estuviera con una dama , ni me levanto, ta hermoso para hacer cucharita y que se haga agua el picolé- Algo improbable porque la temperatura era de 0 grado.
¡Qué frío , hermano!. Hasta la tabla del inodoro estaba helada al igual que el jabón que me puse la cara antes de afeitarme. Para soportar el ofri, cada vez que me pasaba la maquinita por la cara, me acordaba de esos días de noviembre del año pasado. Ese es clima agradable a pesar de los 44 grados que hizo Y encima hay tucumanos que dicen --A no a mi gusta más el invierno-: ¡ Andá, fanfarrón, chanta , insensible!.
Cuando salí en busca del ómnibus rogaba que venga hasta la jeta, así viajaba calentito. Nada, vacaciones de invierno y solo el chofer y dos veteranos como yo ocupábamos el frío colectivo. Cuatro personas en semejante espacio y de lo único que se habló ( si adivinó) fue del frío. Hay que estar rayado para sentirlo, buscar la forma de soportarlo y encima hablar de él. Esta temperatura te vuelve masoquista - Qué lindo frío no, je, je- dijo el chofer; -Claro ,tamos en julio no-, contestó uno debajo de una gorra que le tapaba los anteojos; yo no me quedé callado y ahí nomás metí la cuchara, -Menos mal que el 9 de Julio estuvo con sol”-, acoté. El chofer levantó la vista hacia el espejo y explicó - Escuché en la radio que va nevar esta noche-. Pasando la Plazoleta Mitre ya tenía ganas que nos abracemos todos para entrar en calor. Una conversación reboluda, hubiesen dicho los chicos.
Llegué al laburo y, a que no saben que me dijeron cuando entré- Que frío ta haciendo ,¿No?- Y si , ese es el único tema de conversación por estas horas. Al salir me metí en un bar y el mozo en vez de preguntar que va a tomar, me dijo – Que frío amigo-, si, le contesté y le pedí un cafecito caliente. Llegó frío y me cobró, culpa del turismo dicen, como si lo estuviera sentado en un bar a orillas del Sena, en París..
Los pronosticadores del clima anuncian que el frío durará todo lo que resta del mes, pero que será seco, no húmedo como ayer. Que alivio por lo menos no habrá que mojarse, para salir a caminar por la Ciudad Histórica.
Daniel A. Villalba
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