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Diego sigue probando

El entrenador de la selección argentina, Diego Maradona, condujo ayer una práctica de fútbol en Pretoria, aunque sin definir las modificaciones que introducirá de cara al encuentro frente a Alemania por los cuartos de final.

Argentina jugará el sábado su segunda final del Mundial 2010, pero a la vez el primer partido importante y complicado de lo que va de la competencia.

Eso se palpa en el aire de Pretoria, sobre todo en la Universidad, donde se concentran los dirigidos por Diego Maradona.

Alemania es una potencia y un estigma en los últimos dos mundiales que enfrentó al equipo argentino, porque le ganó la final de 1990 y lo eliminó en cuartos de final en 2006.

Por eso, Maradona y su cuerpo técnico están analizando absolutamente todo: como se mueve Alemania y como contrarrestar esos movimientos.

Según trascendió en Pretoria hay dos posiciones: una la de jugar como en Munich, es decir, un 4-4-2, con Javier Mascherano parado siendo una especie de líbero delante de la línea de cuatro.

La otra posición, la que le gusta más a Maradona, es la de mantener los tres delanteros, con Lionel Messi bien parado de enganche y Carlos Tevez recostado sobre una de las puntas.

Y dentro del esquema de jugar con tres puntas las diferencias pasan por el medio: entre los ayudantes de campo de Maradona y sus allegados opinan y proponen, por más que el que tiene la última palabra es Diego.

Maradona y su gente llegaron a la conclusión que la clave ante Alemania es manejar la pelota, por eso al técnico argentino le encantaría jugar con Javier Pastore y Juan Sebastián Verón, los dos juntos.

Las opiniones son diversas, porque también puede jugar Jonás Gutiérrez por Angel Di María y ahí la duda sería si juega Pastore o Verón.

“No podemos entregarle la pelota a los alemanes”, fue una de las frases que más se escuchó, según cuentan, en las reuniones del cuerpo técnico argentino.

Argentina le ganó con autoridad a Alemania, en Munich, el 3 de marzo pasado, y más allá del esquema utilizado la clave estuvo en que fueron los de celeste y blanco los que manejaron la pelota.

Por eso, mañana, a la hora del almuerzo, quedará todo definido y en la práctica de la tarde el cuerpo técnico argentino plasmará en la cancha todo lo que hablaron, que luego habrá que ver si se traslada al partido del sábado en Ciudad del Cabo.