El establecimiento ubicado en Congreso 74 cerró sus puertas y una veintena de empleados quedaron sin trabajo. Además hasta ayer a la tarde cuatro ancianos todavía no habían conseguido donde habitar y están en la puerta del lugar juntos a los empleados que “tomaron” el edificio. El geriátrico funcionó durante 17 años.
La Nueva Plaza había sido el lugar de residencia de 54 ancianos que abonaban entre 2500 y 3000 pesos mensuales para vivir allí.
Hace unos días, según manifiestan los empleados, el propietario doctor Luis Fernández San Martín decidió cerrar el lugar dejando sin trabajo a 24 empleados que cobraban unos 1000 pesos mensuales. Estos recibían 230 pesos semanales y en la mayoría de los casos estaban en negro y sin los descansos y aportes correspondientes. “Al parecer eran presionados para que acepten esa forma de pago, caso contrario quedarían sin trabajo” cuenta Daniel Castro, Secretario Gremial de ATSA, que junto a otros dirigentes están acompañando a los despedidos, desde hace dos días.
De acuerdo a lo contado por Castro 12 empleados arreglaron la indemnización recibiendo a cambio colchones y muebles que había en el geriátrico. Los otros 12 decidieron “tomar” pacíficamente el edificio, pero permitiendo la entrada y salida de quienes deseen hacerlo. De los ancianos que vivían en La Nueva Plaza solo quedaron cuatro, los demás ya fueron retirados por familiares o conocidos.
“El arreglo propuesto por Fernández San Martín, a través de sus representantes y de la encargada del lugar , Blanca Beatriz Castillo, es abonar una indemnización diez cuotas de 659 pesos cada una. Acá hay empleados como, la cocinera que tiene quince años de antigüedad, y esa cifra es ridícula”, señaló Castro.
Una difícil situación están viviendo los empleados al quedar desocupados y los ancianos que todavía están esperando que alguien los acomode en otro lugar, ya que ellos están solos.
El edificio , hace un tiempo, había sido inspeccionado por el SIPROSA, organismo que instó a sus propietarios a construir una rampa para el ingreso y egreso de sus ocupantes. Esto no sucedió ya que su propietario adujo no poder realizar esa obra, según cuentan los ahora desocupados.
La toma pacífica continuará hasta que haya una solución. La policía, explicó el representante de la sanidad , ya verificó que es una ocupación sin impedimentos de ingreso o egresos de cualquier persona.
Daniel A. Villalba
Todos los derechos reservados Copyright 2007
Terminos y usos del sitio
Directorio Web de Argentina
Secciones
Portada del diario | Ediciones Anteriores | Deportes | Economia | Opinion|Policiales
Contactos
Publicidad en el diario | Redacción | Cartas al director| Staff