Mientras los servicios de telefonía celular figuran en nuestro país entre los más cuestionados por los usuarios, liderando junto con los proveedores de Internet los servicios más denunciados por incumplimiento, según la ONG rosarina Ojo Ciudadano; la cantidad de líneas y la precariedad del sistema crecen. Llegando, incluso, a convertir a la Argentina en uno de los países de habla hispana con mayor cantidad de celulares activos.
Sin embargo, nuestro país también ostenta el extraño privilegio de ser uno de los países con telefonía celular más cara de América Latina.
En Argentina, el costo de una canasta prepaga, en dólares corrientes a diciembre de 2009, asciende a US$ 19,43, valor que ubica a la Argentina en el quinto lugar del ranking regional detrás de Brasil, Honduras, Uruguay y México. Según publicó La Nación, la canasta que toma dólar equivalente (paridad de poder de compra, conocido como PPP) aumenta a US$ 36,70 y el país escala al tercer puesto.
Las tarifas finales de las comunicaciones móviles, a diferencia de las de telefonía básica, no se encuentran reguladas, lo que ha generado un mercado con una fuerte competencia de precios, volviéndolo cada vez más estrecho.
La opción de las empresas para intentar liderar este saturado mercado, que cuenta ya con más de 45 millones de teléfonos móviles activados, es lograr la fidelidad de sus clientes más que conseguir vender nuevas líneas. Así es como aparecen, entre otras, las ya instaladas promos de duplicación de carga para los servicios prepagos.
Los beneficios de cada recarga
Estos bonus varían según la compañía, la vigencia de las promos y hasta por el método de carga del crédito. Cuando el cliente realiza la carga por medio de una tarjeta prepaga, el monto extra a acreditarse figura impreso pero si la carga se hace de manera virtual, es una incógnita.
El vencimiento de este ‘beneficio’ de recarga también entra en una nebulosa. Si la recarga se hace realizando una llamada telefónica, el sistema informa automáticamente las fechas de vencimiento tanto del monto cargado como del crédito adicional. En cambio, si la carga se hace a través de mensaje de texto (SMS) o virtualmente, el usuario solo se entera del vencimiento cuando no le queda más crédito.
Otros aspectos a tener en cuenta son tanto el costo del minuto de comunicación como el de cada SMS, que también tienen variaciones y hasta significativas, dependiendo de la empresa que se contrate.
Los operadores en Argentina y sus tarifas
La compañía que más servicios prepagos tiene en nuestro país es Claro. La operadora de la empresa AMX cuenta con el costo más bajo del minuto prepago y de los SMS, cobrándolos a $1,59 y $0,39, respectivamente. Pero, sus promociones de crédito extra son las de vencimiento más rápido: su vigencia es de solo 15 días, independientemente del monto acreditado.
Si el cliente de Claro realiza una recarga menor a $20, no se le acredita monto adicional. En cambio, si acredita un monto superior a ese importe y menor de 30 recibe 8 pesos de regalo; si carga más de 30 y hasta 100, se duplica.
Movistar, por su parte, segunda en el ranking de penetración de servicios prepagos, aplica idéntico vencimiento a los bonus extra que a los créditos originales de carga.
La operadora móvil de Telefónica de Argentina, que cobra el minuto de comunicación a este servicio a $1,98 y los SMS a $0,44, aplica vencimientos diferentes de acuerdo con el total cargado. Si la carga es de sólo 5 pesos, no tiene crédito adicional y su vigencia es de 5 días; si la carga se ubica entre los 10 y 20 pesos, tampoco tiene bonus pero su vencimiento es a los 10 días.
Cuando la carga a los servicios prepagos de Movistar oscila entre los 25 y 50 pesos, su vencimiento es a los 30 días de realizada. En tanto que el bonus adicional corresponde al 50% de la carga, siempre que supere los 30 pesos. Si se carga un monto superior a 50 pesos, la vigencia se extiende a 45 días y el adicional se mantiene en el 50%.
Finalmente, Personal, la operadora móvil con menor presencia en el mercado prepago de la Argentina, otorga bonus extras siempre y cuando sus clientes realicen cargas superiores a $20.
El empresa de telefonía de Telecom bonifica de la siguiente manera: para recargas entre 20 y 30 pesos, adicional de $8 y válido por 7 días; recarga de 30 a 50 pesos, $20 válidos por 15 días; y cargas superiores a 50 pesos, adicionales de $40 con vigencia de hasta 30 días.
Mientras sus tarifas son de $1,89 para llamadas y de $0,44 para los SMS, la vigencia de las recargas de Personal siempre son de 30 días.
El marco regulatorio
Todo lo concerniente a tarifas de telefonía móvil, contrariamente a lo que sucede con los servicios fijos, no se encuentra regulado en nuestro país. La ley 25891 de Servicios de Comunicaciones Móviles, promulgada recién en mayo de 2004, establece normas de comercialización del servicio pero nada determina con respecto al cuadro tarifario.
Asimismo, el artículo 34 del Reglamento General de Clientes de los Servicios de Comunicaciones Móviles, de la Comisión Nacional de Comunicaciones (CNC), determina que “Los precios, cargos de activación y prestaciones adicionales correspondientes a los servicios incluidos en el presente Reglamento serán libres y de exclusiva responsabilidad del prestador”.
En este escenario, las prestadoras ofrecen un abanico de opciones de planes y promociones de distintas características, a través de distintas modalidades de contratación del servicio. Proponen planes de llamadas locales libres, de descuentos para llamadas internacionales de acuerdo con el país de destino al que llame, descuentos y bonificaciones para números frecuentes y bonificaciones para llamadas a clientes de la misma compañía, entre otros.
Por lo tanto, la competencia de las empresas en materia de precios está en manos del usuario, dependiendo del acceso a la información con que cuente para hacer una elección más conveniente, tomando en cuenta sus hábitos de consumo y usos frecuentes que da a su línea, consultando asimismo, las cláusulas de rescisión anticipada, costos de activación y demás condiciones generales del servicio.
Cómo hacer reclamos
Según establece la CNC, y de acuerdo al Reglamento de Clientes, toda presentación de queja debe hacerse en primer término ante la empresa prestadora. Para ello, el prestador está obligado a contar con mecanismos de recepción y atención al cliente, que incluya, de manera gratuita, un número telefónico de atención continua, las 24 horas.
Si luego de realizado este paso, aún no se reciben respuestas al planteo de queja o el cliente no quedara satisfecho, puede hacer el reclamo en la CNC y para ello es necesario contar con documentación que compruebe el vínculo comercial entre la empresa y el usuario.
En este punto es dónde queda expuesta la magnitud y la precariedad del mercado argentino de celulares, ya que son contados los clientes del servicio prepago que tienen celular a nombre suyo o bajo un contrato. Teniendo en cuenta la proliferación de venta callejera de chips.
Para presentar un reclamo, el cliente debe acompañarlo con una fotocopia de su documento de identidad, en caso de ser el titular. Si se trata de un apoderado, debe presentar un poder ante escribano público o carta poder con firma certificada por entidad bancaria o policial.
Además, hay que adjuntar fotocopias de la factura de la línea y/o del contrato del servicio, de cualquier documentación enviada a la empresa o recibida de ésta e informar fecha y número de reclamo otorgado por la empresa prestataria del servicio y/u otra documentación que crea de interés.
Fuente MDZ
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