20/04/2010 - En General

Obispos chilenos piden perdón a víctimas de pedofilia

El presidente de la Conferencia Episcopal chilena, Alejandro Goic, pidió ayer perdón en nombre de la iglesia católica a las personas directamente afectadas y a las comunidades que han sufrido casos de paidofilia en este país y exhortó a las víctimas a "comunicarnos estos hechos".

"Es total nuestro compromiso de velar incesantemente porque estos gravísimos delitos no se repitan", afirmaron todos los obispos en una declaración conjunta, al término de la 99 asamblea plenaria de la Conferencia Episcopal.

Goic detalló que actualmente son 20 los sacerdotes denunciados en el país por casos de paidofilia.

"Hay cinco sacerdotes que han sido condenados, hay cinco cuyos procesos se están desarrollando y hay unas 10 acusaciones de las cuales algunas han sido absueltas y otras están en estudio", informó.

"No hay lugar en el sacerdocio para quienes abusan de menores, y no hay pretexto alguno que pueda justificar este delito", enfatizó el obispo.

"A las personas directamente afectadas y a las comunidades que en Chile han visto en algún sacerdote motivo de escándalo, les pedimos perdón, y les exhortamos a comunicarnos estos hechos. Es total nuestro compromiso de velar incesantemente porque estos gravísimos delitos no se repitan", subrayó.

El presidente de los obispos católicos adhirió "a las claras y firmes orientaciones del Papa Benedicto XVI" sobre el tema de los abusos sexuales a niños por parte de sacerdote y expresó al Pontífice "nuestra adhesión ante las injustas y falsas acusaciones que ha recibido".

Goic descartó que la convocatoria del Vaticano para reunir 400.000 religiosos en junio próximo, en la Plaza San Pedro, tenga relación con los "lamentables episodios que condenamos y rogamos a Dios que no sigan ocurriendo" de abusos sexuales contra niños por sacerdotes.

"Esa reunión no tiene nada que ver. Estamos celebrando desde junio del año pasado hasta el 11 de junio de este año, que es la fiesta del Sagrado Corazón, lo que se llama el año sacerdotal, que el Papa quiso celebrar justamente para hablar de la santidad del sacerdocio", explicó.

Añadió que la reunión fue programada a comienzos de 2009 con "tres a cuatro días en Roma con invitación a todos los sacerdotes del mundo".