"Este proceso de integración de América del Sur nos tuvo presentes en momentos difíciles, con absoluta solidaridad y el único compromiso de garantizar la voluntad popular de este país, que culminó con la elección suya, Presidente", expresó Cristina, refiriéndose a Evo Morales.
La mandataria argentina aclaró que no deseaba "inmiscuirse en asuntos internos de su país", y afirmó que "la Argentina y los países que ayudamos a poder culminar este proceso demócrata, fuimos partícipes de su triunfo, que es el triunfo del pueblo de Bolivia".
En ese sentido, Cristina recordó "esos momentos difíciles" en los que el
ex presidente Néstor Kirchner se acercó a "poner el hombro y algo más,
como acostumbra, para ayudar a la hermana Bolivia".
Al referirse
al convenio suscrito, la presidenta dijo que es señal de "buena
hermandad y buena vecindad" compartir recursos naturales como lo hacen
Argentina y Bolivia, "y además a precios justos".
Resaltó también
el proceso integrador que vive Bolivia en la constitución de su Estado
Plurinacional, y dijo que "es lo más valioso de este proceso que vivimos
los pueblos del sur de América, de respeto a nuestras identidades,
experiencias históricas y políticas".
"Es sabernos diferentes,
pero no separados. Esta es la consigna", expresó.
Dijo que ambos
países comparten "la misma historia de emancipación y lucha por la
democracia", y consideró que el "gran objetivo es mejorar la calidad de
vida de nuestra gente".
"La identidad con Evo es la de luchar por
mejorar la vida todos los bolivianos, en el caso de él, y de los
argentinos en el mío", agregó, asegurando que en esa tarea enfrentan
"poderosos intereses; minoritarios, pero poderosos".
Indicó que
"con inteligencia, convicciones, firmeza y voluntad", los dos países
"lograrán profundizar los procesos de transformación y cambio".
"Esos
compromisos de libertad, justicia, democracia e igualdad, es lo que nos
moviliza hoy, compartiendo con ustedes un proceso histórico de
transformación, como el de este Estado Plurinacional", afirmó.
"En nombre de estos principios, los de la libertad, de
la democracia, la igualdad de oportunidades para todos nuestros
conciudadanas y conciudadanos. Es lo que nos moviliza hoy, a estar aquí,
compartiendo, junto a ustedes, un proceso histórico de transformación
como el que está viviendo el Estado Plurinacional de Bolivia", afirmó en
medio de expresiones de algarabía popular en el polivalente, escenario
de la firma del acuerdo gasífero y de una fiesta folclórica y cultural.
Enfatizó, a renglón seguido, que "el gran objetivo" de procesos de
cambio de paradigma social y político, como el que registra Bolivia
"debe ser siempre mejorar la calidad de vida de nuestra gente, de
nuestro pueblo".
La jefa de Estado argentino homenajeó la lucha libertaria el siglo
XIX de la heroína boliviana, Juana Azurduy de Padilla (1780-1867), y le
otorgó, de manera póstuma, el grado de generala del Ejército de su país.
"Somos parte de la tradición histórica, de luchas emancipadoras por
la liberación, por la democracia", dijo dirigiéndose a Morales y García
Linera que acompañaron su periplo por Sucre.
La gobernante, cuyo mandato expira en julio de 2011, fustigó el
régimen de democracia que rigió en América del Sur en el pasado
reciente.
"Durante mucho tiempo nos hicieron creer que la democracia o la
libertad podían ser un ejercicio sin justicia ni equidad social",
reclamó.
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