22/03/2010 - En General

Lula dispuesto a dialogar con Hamas y Hezbola

"Precisamos conversar con los iraníes, precisamos conversar con los sirios, con Israel, con los palestinos, con Hamas y con Hezbolá, o sea con quien tenga problemas en el conflicto de Medio Oriente", aseveró Lula da Silva.

"Precisamos conversar con los iraníes, precisamos conversar con los sirios, con Israel, con los palestinos, con Hamas y con Hezbolá, o sea con quien tenga problemas en el conflicto de Medio Oriente", aseveró Lula da Silva.

Las organizaciones Hamas, palestina, que controla la Franja de Gaza y Hezbolá, libanesa, fueron incluidas en una lista de grupos terroristas por Estados Unidos.

El Tesoro estadounidense congeló los activos y prohibió transacciones con el Banco Nacional Islámico y la televisora, Al-Aqsa, por considerar que ambas contribuyen a las operaciones de Hamas, una "organización terrorista global".

"Brasil tiene interés en la paz, entendemos que la paz le interesa a Israel, a Palestina, a Jordania, a Estados Unidos a Irán, a Siria, le interesa a todo el mundo", aseguró el mandatario brasileño.

"Soy muy optimista, no creo en cosas imposibles, creo (la solución) de cosas que son difíciles, para resolver cosas difíciles la política precisa establecer conversaciones", prosiguió.

En su programa radial semanal, Café con el Presidente, Lula retomó su tesis sobre la necesidad de ampliar la mesa de diálogo en Medio Oriente, incluyendo interlocutores rechazados tanto por Estados Unidos como por Israel.

Dirigentes israelíes habían solicitado a Lula, en el Knesset, parlamento israelí, que revea su relación con Teherán.

El gobernante brasileño viajará a Irán el 15 de mayo donde espera analizar con el presidente Mahmud Ahmadinejad, con quien se reunió en noviembre pasado en Brasilia, el conflicto en Medio Oriente.

Hace tres semanas Lula había declarado, durante la visita de la secretaria de Estado Hillary Clinton a Brasil, que confía en el diálogo con Irán, y desestimó aplicar sanciones a Teherán por enriquecer uranio.

Miembros del Partido de la Socialdemocracia Brasileña, opositor, del ex presidente Fernando Henrique Cardoso, consideran que el gobierno brasileño es "demasiado pretencioso" al intentar mediar en aquella región.