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AMPLIARSan Martín volvió al triúnfo

¡Que aguante tienen los cirujas!

Horario tempranero, con la comida en la garganta todavía, sol, humedad, entradas caritas, equipo discreto, jugadores igual y encima ganar por una falla del rival. Ayer, San Martín, gracias a un gol en contra, le ganó a Fero Carril Oeste por 1 a 0. Chimino derrotó a su compañero y permitió que los aguantadores hinchas santos festejaran un triunfo de local.

“Como duele que cualquier equipo nos falte el respeto acá en nuestra cancha”, mascullaba un hincha vestido de “ciruja”.

Verdad que no debería doler porque este plantel con el cual Carlos Roldán inició esta participación en la B Nacional entregó muchas expectativas y pocas alegrías. Pero es lo que tienen. No hay que pedirle más.

Apenas unos minutos de juego y ya el uuuhhh recorrió las tribunas santas. Desinteligencia entre Trotta y Lencina y casi gol de la visita. Los gritos bajaban el aliento también pero la desconfianza ya estaba, de vuelta, instalada en la ex fortaleza santa. Le mojaron la oreja y se quedó mirando. Abán estaba para ser el mejor de la cancha, y lo fue. Desbordó, ganó en la personal. Literalmente lo mareó a Trotta y a todos los que intentaban marcarlo, pero le falto inteligencia y compañía para aprovechar  tantas facilidades y definir.

San Martín sin nadie que cree fútbol claro ( Martínez “sigue” en Grecia ) y los delanteros deben bajar mucho a buscar juego. Que desconcertante es este San Martín y que distinto a aquel que ascendió hace  dos temporadas. Ahora hay poco criterio, escasa concentración , poco juego colectivo, nada de solidaridad y para peor poquitas ideas futbolísticas. Menos mal que los cirujas tienen mucho aguante y ayer en un 65 por ciento ,aproximadamente, cubrieron las tribunas santas. Gritaron con desesperación el gol en contra de Christián Chimino  a los 24 minutos del primer tiempo .Una muy buena jugada del "Colo" Nievas Escobar , recibió Montero que envió un centro  desviado por  el defensor del “verde” de Caballito, que venció a Etulain. La gente gritó el gol con bronca. Fue un desahogo,anticipado  porque saben que siempre después de ponerse en ventaja  el Santo tucumano,  trae el  sufrimiento.

Y no le erraron,  con los dedos cruzados observaron durante 66 minutos como Ferro buscaba y hubiese sido justo que por lo menos  empatara. No pudo porque Lencina se reivindicó ante su gente atajando dos pelota claves , sobretodo la última sobre los 47 minutos del final del partido, cuando voló (en el arco de la  Rondeau como dice la popu) y desvió una pelota que solo el la vio. Roldán le ratificó la titularidad para el partido con Platense. Es justo.

San Martín ganó porque esta vez ligó y el rival no supo, no es que no pudo, empatar y ganarlo, como talvez hubiese sido el resultado justo.

Daniel A. Villalba
villalbadaniel07@gmail.com