El ex presidente fue intervenido ayer, con éxito, según el parte médico oficial, en el Sanatorio de los Arcos, de la Ciudad de Buenos Aires. La afección estaba vinculada a una placa ulcerada de fácil remoción. La presidente Cristina Kirchner lo acompañó todo el tiempo.
"Salió totalmente lúcido" de la intervención quirúrgica a la que fue sometido de "urgencia", dicta el parte médico.
En la tarde de ayer, el ex presidente Néstor Kirchner fue intervenido en el Sanatorio de los Arcos, de la ciudad de Buenos Aires, tras padecer en la mañana del domingo un "cuadro clínico causado por una patología de su arteria carótida derecha".
Luego del diagnóstico, los médicos lo operaron de forma "exitosa" durante una hora y media, y anunciaron que el paciente deberá permanecer en terapia intensiva durante 48 horas.
"Salió totalmente lúcido"
de la intervención quirúrgica a la que fue sometido de "urgencia" para
remover "una placa ulcerada complicada" y localizada en la arteria
carótida derecha, expresó el cirujano Víctor Caramutti, a cargo la
operación, quien agregó: "Se decidió la operación para lograr una
excelente recuperación".
Tras la cirugía, funcionarios del
gobierno nacional arribaron al Sanatorio de los Arcos, en el barrio de
Palermo, para acompañar a la presidente
Cristina Kirchner. Entre los mismos se cuentan a los ministros Carlos Tomada (Trabajo), Nilda Garré (Defensa), Julio De Vido (Planificación), Amado Boudou (Economía), Alberto Sileoni (Educación) y Jorge Taiana (Relaciones Exteriores). También lo hicieron los secretarios de Derechos Humanos, Eduardo Luis Duhalde, y de la Presidencia, Oscar Parrilli.
El canciller Jorge Taiana
respondió "claro que sí" cuando los periodistas le preguntaron si había
sido exitosa la operación a Néstor Kirchner y agregó que "todo está bien, las noticias son buenas".
El ministro de Trabajo, Carlos Tomada, que se acercó a la clinica para dar su apoyo al ex mandatario, destacó que "afortunadamente salió todo bien". A su vez, el titular de la cartera laboral indicó que la operación lo "sorprendió como a todo el mundo".
Por su parte, el diputado Juan Cabandié pidió
que los seguidos del ex presidente se retiren a sus casas y guarden
silencio frente al Sanatorio de los Arcos. Además, dijo que Kirchner "está bien y está hablando".
La presidente de la Nación, Cristina Kirchner, se encuentra en la clínica acompañada por el Secretario de Medios, Alfredo Scocimarro, y el senador José Pampuro.
Patología
Kirchner, quien estuvo acompañado por la presidente y su familia, padeció una obstrucción en la arteria carótida produto de una "placa ulcerosa" que fue removida en la operación.
El diputado nacional sufrió en la mañana del domingo un adormecimiento en el brazo izquierdo que requirió una rápida consulta médica, la que derivó en el traslado desde la quinta de Olivos hasta la clínica privada.
La enfermedad de las arterias carótidas, que padece el ex presidente Kirchner, afecta a los vasos sanguíneos que conducen a la cabeza y el cerebro. Según fuentes médicas, ciertos trastornos de salud pueden
producir estrechamientos y asperezas en el interior de las arterias
carótidas y con el tiempo, estos daños aumentan el riesgo de tener un
ataque cerebral o accidente cerebrovascular.
En tanto, el
arzobispo de Buenos Aires y primado de la Argentina , cardenal Jorge
Bergoglio, dispuso que el presbítero Juan Torrella se acerque al
Sanatorio para "ofrecer asistencia espiritual a la familia, simplemente
tiene el objetivo de acercar el consuelo".
"Hace instantes finalizó la cirugía efectuada a Néstor Carlos Kirchner, la cual resultó exitosa. El paciente permanece en terapia intensiva con control evolutivo", señaló un parte oficial firmado por el doctor Marcelo Ballesteros, subdirector de la Unidad Médica Presidencial.
"En una operacion sencilla también se ofrece esta asistencia, el sacramento de la unción de los enfermos", dijo a C5N Torrella, quien además tenía la misión de manifestar la preocupación de Bergoglio por la salud de Néstor Kirchner.
Antecedentes
Néstor Kirchner pasó por el quirófano durante su presidencia, en 2006, cuando padeció una gastroduodenitis hemorrágica provocada por un calmante para el dolor que le provocó un tratamiento odontológico, por lo cual estuvo poco más de dos semanas internado en un hospital de Río Gallegos, en Santa Cruz.
La operación estuvo supervisada por su médico personal, Luis Buonomo, quien este domingo se encuentra en el Sanatorio de los Arcos frente al nuevo episodio sanitario.
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