Las cuatro personas que habían desaparecido el sábado 14 de noviembre fueron halladas sin vida, dos a diez metros del auto y dos adentro, según adelantó C5N en una primicia exclusiva. Los investigadores creen que la familia se accidentó en la Ruta 31 por el aparente mal estado del camino, que habría provocado el vuelco y la caída del auto
Se acabó el misterio a 24 días de la desaparición de la familia Pomar. El país entero estuvo en vilo por el caso en el que trabajaron miles de efectivos de diferentes provincias. Esta tarde apareció el Fiat Duna rojo destruido con señales de haber volcado en un monte junto a la Ruta 31, en el partido de Salto, con todos los integrantes de la familia muertos. Todo indica que fue un accidente.
Según la primicia exclusiva de C5N,
el vehículo de los Pomar fue hallado destruido a metros del camino que
une la Ruta 7 con la ciudad de Salto (a 17 kilómetros de esa ciudad
bonaerense), en la localidad rural de Gahan. Los cuerpos
de las dos hiñas se encontraron separados a unos diez metros del
rodado, al parecer expulsados por el impacto de la caída, y los dos
cadáveres de los padres quedaron en el interior del coche, según confirmó el ministro de Seguridad de la Provincia, Carlos Stornelli.
Altas fuentes del Ministerio de Seguridad de la provincia de Buenos Aires también precisaron
que el hallazgo del coche, que quedó a 15 metros del camino, ocurrió
pasadas las 16:30 en un lugar de difícil acceso y el cual ya había sido
patrullado cinco veces por helicópteros de las fuerzas.
Según las primeras informaciones, la
espesa vegetación que hay al pasar una curva cerrada por donde habría
despistado y caído el Fiat Duna no permitió que se visualizara el auto
durante su búsqueda. Fue a 60 kilómetros del peaje de Villa
Espil (1 hora y diez minutos de viaje), donde se los vio por última vez
a los Pomar a través de una imagen de cámaras de seguridad.
Consultado por C5N, Paul
Starc, subsecretario de Investigaciones bonaerense, confirmó el
hallazgo del auto y de los cuatro integrantes de la familia, pero
aclaró: "Todavía no sabemos qué pasó". Según se sospecha, Luis Pomar,
el padre de la familia, no vio la curva -viajaban pasadas las 20 y era
de noche- y por eso el coche siguió de largo hacia el monte.
En estos momentos se encuentran trabajando en el lugar la Policía científica de Pergamino, de La Matanza y de La Plata, donde está la central de la división. La fiscal Karina Pollice, de la fiscalía de Instrucción Nº 4 de Pergamino, a cargo de la investigación, se encuentra en la Ruta 31.
El ministro de Seguridad bonaerense, Carlos Stornelli, también arribó
al lugar, ubicado a 180 kilómetros de la ciudad de Buenos Aires.
Desde el sábado 14 de noviembre, cuando tuvieron su último contacto con sus familiares, los investigadores especularon con que Luis Fabián Pomar (40 años), su esposa Gabriela Viagrán (37) y sus dos hijas Pilar (3) y Candelaria (6) podrían
haber sido secuestrados, robados o que se había desatado una crisis
familiar. De hecho, la primera hipótesis descartada había sido la de un
accidente.
La Ruta 31 es una vía que conecta la Capital Federal con Salto y muy utilizada por los habitantes de la zona, ya que por la Ruta 8, otro camino alternativo, hay que pagar peajes, hay más tráfico y el kilometraje es casi el mismo. Los investigadores especulan con que el mal estado de la ruta o la falta de señalización del camino pudo haber despistado el coche.
El final menos esperado
Al ser un día feriado y dada la trascendencia mediática que tuvo el caso, miles
de habitantes de Salto se acercaron al lugar del accidente cuando se
conoció el trágico desenlace de los Pomar. Entre policías,
investigadores, bomberos, periodistas y vecinos, una multitud quedó
apostada junto al Fiat Duna rojo.
Sobre las 17:15 comenzó la identificación de los cuerpos, que ya se encontraban en fase de descomposición, pero no como se esperaba tras 24 días a la intemperie. Por eso se duda si cayeron el mismo 14 de noviembre o algunos unos días después. Según trascendió, los ferétros presentan importantes traumatismos producto de la impresionante caída desde la Curva de Plazibat.
Los primeros informes de los peritos señalarían que no habría habido una maniobra brusca antes de que se precipitara el vehículo por la ausencia de marcas en el pavimento, por lo que no se descarta que el conductor se quedara dormido al volante.
Juan Damonte, un vecino de Gahan, señaló en C5N que un conductor de una cosechadora de terrenos aledaños fue quien vio el coche volcado junto
a la Ruta 31 en el mediodía de ayer y que luego se puso en contacto con la
Policía de Salto. El primer oficial que llegó al lugar fue un comisario
de nombre Marcos.
Fuente: Infobae.com
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