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En la segunda edición de "Protagonistas", la historia de Bella Vista

Hoy a las 21 en el Instituto San José de Bellas Vista, se presentará la edición número 2 de la revista Protagonistas – Bella Vista, la historia de un pueblo luchador. Creación y publicación del Ente Cultural. Lugar donde se destacaron dos hombres, Atilio Santillán líder de los trabajadores de la caña de azúcar y el padre Francisco Albornoz, quien goza del eterno reconocimiento de su pueblo, por su compromiso social y generosidad.

Interesante publicación.

Este número está dedicado a una página de la historia de Bella Vista y su comunidad en donde se destacaron dos hombres que lucharon por sus ideales desde distintos lugares: Atilio Santillán líder de los trabajadores de la caña de azúcar y el padre Francisco Albornoz, quien goza del eterno reconocimiento de su pueblo, por su compromiso social y generosidad: La Iglesia tiene que estar en los problemas. No podemos predicar con el estómago vacío, pues el hombre además de lo espiritual necesita de un bienestar general.

Los testimonios y las historias narradas en esta revista pueden parecer hechos anecdóticos, de los tantos que se vivían en los años sesenta y desataron violencia social, circunstancias que fueron acentuándose en la década de los setenta. Sin embargo, entre la heterogeneidad de la protestas, el espíritu de lucha del pueblo de Bella Vista, fue un ejemplo de sus ciudadanos; defender la fuente de trabajo no es cosa menor, pero despertar a toda una comunidad es un hecho sustantivo que implicó haber desarrollado con eficiencia prácticas culturales en defensa de los derechos del hombre a trabajar en democracia, y que estimulan, sin duda alguna, valores como la solidaridad y el compromiso colectivo. El costo de estas actitudes, lastimosa e injustamente, se paga con el dolor, el sacrificio, y a veces con la vida, pero el haberlo logrado combatió uno de los peores flagelos de la sociedad: la exclusión, y lo que es peor, la desesperanza.

A más de cuarenta años de esa movilización, que permitió la recuperación del Ingenio de Bella Vista, la ingrata experiencia de los primeros ensayos neoliberales en nuestra Provincia, dejó un saldo de consecuencias devastadoras para el sector trabajador de la caña de azúcar.