27/11/2009 - En General

Notable crecimiento en el número de estudiantes universitarios en Brasil

El número de estudiantes matriculados en universidades brasileñas fue de 5.080.000 en 2008, lo que representó el 4,1% más que en 2007, y confirma la tendencia de aumento de la población universitaria observada en los últimos años, reportó este viernes un informe oficial.

El Censo sobre Educación Superior presentado hoy por el Ministerio de Educación muestra que en 2008 ingresaron a las universidades brasileñas 1,9 millones de estudiantes, con lo cual completó una secuencia de 4 años de aumento en el número de nuevos alumnos.

A pesar del crecimiento del contingente de nuevos estudiantes, poco menos de la mitad concluyen sus cursos, de acuerdo al estudio del Ministerio de Educación elaborado con base en datos del Instituto Brasileño de Estadísticas y Censos.

El 53% de los estudiantes que ingresan a entidades privadas culmina sus carrera, mientras ese porcentaje sube al 65 en el caso de entidades públicas.

La expansión del número de estudiantes se debe, fundamentalmente, al ingreso de jóvenes de las clases socioeconómicas C y D, favorecidos por Programa Universidad para Todos (Prouni) a través del cual el estado distribuye con becas que financian total o parcialmente los estudios.

Para acceder a ese subsidio los aspirantes deben rendir el Examen Nacional de Educación Media (ENEM), del que participan millones de personas de todo el país.

Según expertos el ENEM cumple una doble función, da transparencia a los criterios de otorga de becas y universaliza los exámenes, obligando a las escuelas públicas a preparar a sus estudiantes.

En el sistema anterior los estudiantes de escuelas públicas prácticamente ni aspiraban ingresar a la universidad.

El ENEM de 2009 fue suspendido debido a un supuesto fraude detectado por una denuncia de la prensa. El gobierno también impulsa las "cotas raciales" que garantizan un número de cupos en universidades públicas a postulantes negros.

Esos programas de estímulo a los ciudadanos pobres permitieron que cientos de miles de personas retomaran los estudios que habían abandonado al concluir la escuela media.

Y es por esa razón que sólo el 13,72 % de la comunidad universitaria brasileña está integrada por alumnos de entre 18 y 24 años, considerada como "la edad adecuada para estar en la facultad", según Reinaldo Fernándes, presidente del Instituto Nacional de Pesquisas Educacionales Anísio Teixeira.

El ministro de Educación, Fernando Haddad, reconoce que el programa Prouni es un paliativo con el cual el gobierno da respuesta inmediata a la demanda de estudios de la sociedad, pero el problema de fondo es la falta de un sistema universitario estatal más robusto.