Montero, BOLIVIA 13 nov (ABI).- El presidente Evo Morales desestimó el viernes campañas electorales que pretenden enlodar el proceso democrático con acusaciones de "dictadura" y "autoritarismo" contra el gobierno.
En una concentración política de las organizaciones del norte integrado del departamento de Santa Cruz celebrado en Montero con la participación de miles de habitantes, el Jefe de Estado anotó que "un Gobierno que ha ganado cuatro veces consecutivas consultas populares con más del 50 por ciento no puede ser calificado como dictatorial, sino un resultado de la voluntad del pueblo boliviano".
Señaló que en los 183 años de vida republicana, nunca
un partido político ha ganado dos elecciones consecutivas con más del
50 por ciento y otras dos con más del 60 por ciento.
Morales se refirió al contundente triunfo que obtuvo en los
comicios generales de 2005 con el 53,8 por ciento de la votación, lo
que le permitió acceder a la Presidencia convirtiéndose en el primer
líder indígena que accede al máximo cargo de administración en toda la
historia política del país.
Agregó que posteriormente, el Movimiento al Socialismo (MAS) ganó
las elecciones de Asamblea Constituyente con más del 50 por ciento.
Después trataron de desalojarme del poder al precipitar un
referéndum revocatorio el 10 de agosto de 2008, en el que el pueblo me
ratificó con el 67 por ciento", dijo.
El Presidente subrayó que en enero de 2009, el pueblo fue
nuevamente a las urnas para emitir su voto por la propuesta de nueva
Constitución que logró el respaldo del 61 por ciento de todos los
ciudadanos.
Agregó que, con esas realidades, no se puede calificar a un
Gobierno de "dictatorial" o "totalitarista" si siempre ha buscado
consensos con los opositores y ha obtenido el respaldo popular.
Puso como ejemplo lo sucedido para aprobar la nueva Carta Magna que
había sido debatida desde agosto de 2006 por la Asamblea Constituyente.
Dijo que con el fin de lograr una Constitución de consenso hubo
reuniones en el Congreso con los partidos, líderes regionales y
movimientos sociales.
"El resultado fue que el 25 de enero los bolivianos fueron a las
urnas a un referéndum constitucional en el que dieron un respaldo
mayoritario a la propuesta que fue promulgada en febrero de 2009",
anotó.
El Jefe de Estado hizo patente su satisfacción porque cada vez se
suman más sectores al proceso de cambio que no solamente beneficia a
los sectores campesinos, sino a todos los bolivianos, dijo.
"En 1995 el movimiento campesino y sindical tomó la decisión de
conformar un movimiento político que luche por el poder para defender
las reivindicaciones de los trabajadores", expresó el Presidente.
Agregó que, tras las elecciones de 1997, 2002 y 2005, se produjo un
potenciamiento del Movimiento al Socialismo Instrumento Político por la
Soberanía de los Pueblos (MAS-IPSP) porque cada vez más sectores
laborales, profesionales, intelectuales y otros se sumaron a la
revolución democrática y popular que ha recuperado la dignidad del
pueblo y el respeto a su soberanía.
Precisó que, al iniciar su mandato en enero de 2006, tomó la
decisión de impulsar medidas para la recuperación del patrimonio
estatal, inicialmente con la nacionalización de los hidrocarburos, lo
que ha permitido al país captar recursos que permitieron una
estabilidad económica.
"Con esos recursos, se optó por llevar adelante una democratización
de la distribución de los recursos "porque el dinero del pueblo debe
ser para el pueblo". De esa forma nacieron el Bono Dignidad para las
personas de la tercera edad, el Bono Juancito Pinto para los escolares
de primero a octavo año y el Bono Juana Azurduy de Padilla para las
mujeres embarazadas", anotó.
El Jefe de Estado expresó que las constantes manifestaciones de
apoyo que recibe a lo largo del país le hacen ver que en las elecciones
generales de diciembre próximo no solamente está garantizado el
triunfo, sino un resultado superior al obtenido hasta hoy, de por lo
menos el 70 por ciento de los votos.
Dijo que es necesario el apoyo mayoritario del pueblo para ganar
por un amplio margen los comicios, lo que permitirá una mayoría plena
en una Asamblea Legislativa Plurinacional (ALP) que esté al servicio de
los intereses populares y no de grupos minoritarios que defienden las
prebendas que acumularon a lo largo de las dictaduras y de los
gobiernos neoliberales.
Manifestó que en estos casi cuatro años en el poder, el proceso de
cambio no alcanzó la celeridad adecuada porque algunas de las leyes
fueron obstaculizadas en un Senado con una mayoría opositora, como la
Ley del Seguro Universal y la Ley de Lucha contra la Corrupción.
Agregó que con un Poder Legislativo que esté conformado por
parlamentarios patriotas y con conciencia social, el proceso de cambio
y la aplicación de la nueva Carta Magna tendrá un ritmo sostenido para
defender los intereses de los bolivianos.
Se refirió al programa de gobierno que ha propuesto el MAS al
pueblo que, contrariamente a lo que sucede con otras agrupaciones
políticas, ha sido consecuencia de la contribución de todos los
sectores de la población.
Dijo que, entre otras demandas del pueblo, el programa incluye un
anteproyecto de Ley de Seguro Agrícola para favorecer a los pequeños y
medianos agricultores y otro para regularizar todas las propiedades a
fin de que los ciudadanos puedan acceder a la plenitud de sus derechos.
El Primer Mandatario expresó que le gustaría permanecer en la
Presidencia otros cinco años para servir mejor al pueblo, tras la
experiencia lograda en los primeros cuatro años.
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