20/10/2009 - En General

Desde diciembre del 2008 1.750 católicas se prepararon para el Encuentro de Mujeres

Lo reconoció la iglesia católica a través de su agencia de noticias AICA. Desde diciembre, el arzobispo de Tucumán, monseñor Luis Héctor Villalba, formó una comisión coordinadora, a cargo del presbítero Barrionuevo. Trabajaron con seminarios de estudios, se elaboró un dossier de los temas culturales mas urgentes (unas 150 páginas temáticas) se organizó un Congreso regional de todo el NOA.

Ahora toca avanzar a una mayor profundización de lo hecho, se lee en el cable de AICA.

La iglesia Católica de Tucumán, según explicó a AICA el presbítero Marcelo Barrionuevo, se preparó para estar presente en el XXIV Encuentro de Mujeres que se realizó en Tucumán desde el 10 al 12 de diciembre, mediante sus mujeres cristianas.

Desde diciembre, el arzobispo de Tucumán, monseñor Luis Héctor Villalba, formó una comisión coordinadora, a cargo del presbítero Barrionuevo, precisamente, la que trabajó denodadamente en todo lo organizativo y de modo especial en la preparación de las mujeres que participarían

En este sentido la iglesia reconoce que fueron unas 1.750 laicas que participaron desde su rol de mujer pero bajo la inspiración cristiana, desde la cual pudieron debatir en serenidad pero con firmeza sobre los valores y las verdades fundamentales de lo humano y cristiano.

Un elemento por destacar fue la preparación que tuvieron las católicas desde diciembre del año pasado. Trabajaron con seminarios de estudios, se elaboró un dossier de los temas culturales mas urgentes (unas 150 páginas temáticas) se organizó un Congreso regional de todo el NOA (Noroeste Argentino) con exponentes nacionales, se organizaron conferencias y talleres en los decanatos, movimientos eclesiales, parroquias, conferencias libres, etc.

Además hicieron una red virtual mediante la cual se fueron comunicando artículos y cuestiones y respuestas sobre los temas más urgentes.

Por si esto no fuera poco hubo organización logística de preparación, inscripción, contactos con las más de 450 mujeres que vinieron de distintas partes del país, sumándose a las 1.300 tucumanas que participaron activamente.

Según el cable, esta participación argumental en áreas como género, dignidad de la mujer, salud reproductiva, aborto, cultura y educación fueron de tal entidad que produjeron entre estupor, admiración y lamentablemente enojo.

A su vez lamentan las reacciones contra las mujeres católicas ya que se consideró que su presencia interponía la posibilidad de colocar la petición del aborto como agenda inmediata en el país.

Finalmente la iglesia considera que es mucho lo que se trabajó y mucho el fruto que quedó. Ahora toca avanzar a una mayor profundización de lo hecho. Si hay algo que quedó como fruto fue un verdadero espíritu de participación, es decir, pasar de una visión meramente privada de la vida cristiana a una participación activa de la mujer en la transformación de la cultura y la sociedad.