Más de dos mil personas despidieron los restos de Mercedes Sosa en una multitudinaria ceremonia que se completó junto al canal Cacique Guaymallén de Mendoza, donde fueron arrojadas cenizas de la popular cantante junto a ofrendas florales.
A esas aguas también se volcaron años atrás las cenizas del poeta mendocino Armando Tejada Gómez, uno de los que compartió con Sosa el nacimiento del Movimiento Nuevo Cancionero.
Familiares, amigos y seguidores de la "Negra" se reunieron este lunes
para rendirle tributo y cumplir uno de los últimos deseos de la artista
fallecida el 4 de octubre pasado a los 74 años en la ciudad de Buenos
Aires.
Después de un acto que comenzó a las 18, en la Plaza Pedro del
Castillo, centenares de personas se trasladaron hasta el canal más
antiguo de Mendoza para decir adiós a la cantante y arrojar sus
cenizas.
El hijo de Sosa, Fabián Matus, lideró la ceremonia junto a otros
familiares de la artista, mientras los seguidores de la "Negra"
entonaron canciones de la artista e incluso las estrofas del Himno
nacional en señal de tributo.
"Estamos acá para cumplir un deseo más de la mamá, que era que parte de
sus cenizas estuvieran aquí en Mendoza, provincia que la ha formado
culturalmente", comentó Matus en una conferencia de prensa antes del
homenaje a Sosa.
Matus agregó que Mendoza fue para la artista "el lugar de nacimiento de las en aquel momento, utopías".
"Utopías que luego fueron sueños y después realidades en algunos casos", remarcó.
"La amistad y la camaradería que se vive en Mendoza ha sido algo que
terminó marcando a la mami a lo largo de los años", agregó el hijo de
la artista.
El sitio elegido para la ceremonia de despedida atesora un significado
enorme para la familia Sosa, ya que en el mismo canal Cacique
Guaymallén fueron esparcidos los restos de Oscar Matus, que fuera no
sólo esposo de la "Negra" y padre de Fabián, sino también uno de los
impulsores junto con la cantante tucumana del movimiento Nuevo
Cancionero Cuyano.
El organizador del acto en la Plaza Pedro del Castillo, el artista
Pocho Sosa, entonó canciones emblemáticas de Mercedes junto a otros
cantores.
La emoción llegó al máximo cuando cantaron a capela "Zamba del riego",
mientras la gente mostraba su devoción hacia la tucumana con
fotografías y pancartas. Una de ellas decía: "Gracias Negra, que me has
dado tanto."
"Tengo ganas de llorar, tenemos una responsabilidad muy grande",
expresó Pocho Sosa, durante una ceremonia de la que también
participaron el padre Aldo Godino, párroco de la Iglesia de San
Nicolás, y el recitador Jorge Sosa.
El acto fue abierto a todo público, sin protocolos ni banderas
políticas, porque así fue la voluntad de Mercedes Sosa, según expresó
su hijo.
Después de las canciones, familiares de la "Negra" tomaron la urna,
bendecida por Godino, y arrojaron al canal las cenizas de Sosa, que
ahora regarán las tierras donde vivió momentos trascendentales de su
vida.
La semana pasada restos de la "Voz de América" también fueron
esparcidos en el cerro San Javier de su Tucumán natal, como parte del
mandato delegado por Sosa a sus seres queridos en el marco de su última
voluntad.
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