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Evo Morales: ALBA impedirá que el imperialismo expolie recursos de los estados

Cochabamba, Bolivia, 14 oct (ABI).- La Alianza Bolivariana para nuestra América (ALBA) es un “sindicato de presidentes que luchan por los intereses de los pueblos que impedirá que el imperialismo saquee los recursos estatales”, afirmó el miércoles el presidente Evo Morales.

Morales se reunió con los pobladores de Tiraque, una localidad del departamento de Cochabamba ubicada a 565 kilómetros al sudeste de La Paz y a 3.200 metros sobre el nivel del mar, donde fue recibido por miles de agricultores que proclamaron su candidatura cuando faltan menos de dos meses de las elecciones generales del seis de diciembre en las que fue postulado a la reelección.

El Mandatario subrayó que la Cumbre Presidencial de ALBA es un encuentro diferente porque “refuerza la posición de los países de la región que sustentan una política diferente a la del sistema capitalista y el modelo neoliberal encabezada por Estados Unidos”.

Explicó que los presidentes revolucionarios de América Latina y del Caribe se habían organizado en una especie de “Sindicato de mandatarios antiimperialistas para oponerse a las políticas de privatización de empresas estatales, contra el saqueo de los recursos naturales y la imposición del libre mercado que solamente beneficiaron a las transnacionales y a los países capitalistas”.

Señaló que ahora Estados Unidos pretende tentar a las naciones en vías de desarrollo a suscribir Tratados de Libre Comercio (TLCs) con el fin de promover una competitividad que únicamente va a beneficiar a las naciones desarrolladas. Hasta ahora solamente aceptaron esas propuestas en Latinoamérica Colombia y Perú.

“¿Cómo los países pobres y pequeños productores pueden competir libremente con las grandes empresas grandes transnacionales?”, se cuestionó, al subrayar que el mercado está controlado por los países capitalistas.

Dijo que por ello la ALBA propone un Tratado de Comercio de los Pueblos (TCP), cuyo espíritu no es la competitividad, sino la complementariedad entre los pueblos, a fin de que los menos asistidos sean cooperados por los demás.

Agregó que Bolivia ya ha comenzado con Venezuela un programa de complementariedad y proseguirá con Brasil y otras naciones porque considera que es el mejor camino para que los pueblos en vías de desarrollo fortalezcan sus economías, cuenten con recursos para impulsar programas de lucha contra la pobreza.

El Jefe de Estado subrayó que los países en desarrollo deben fortalecerse y no confiar en las ofertas del imperio que adopta una estrategia de debilitamiento de los gobiernos revolucionarios que defienden los intereses nacionales desde hace mucho tiempo.

Puso como ejemplo lo sucedido con Bolivia hace poco más de dos décadas cuando las exportaciones de estaño eran su principal fuente de sobrevivencia. “En la década de los años 80, cuando estaba en la administración el gobierno de la Unidad Democrática y Popular (UDP) y cuando se había reencaminado la democracia, Estados Unidos provocó la caída de los precios del mineral al amenazar con las reservas que poseía en la General Service Administration (GSA) acumuladas de la propia Bolivia durante la guerra mundial.

Señaló que con la crisis financiera internacional se ha provocado una caída de los precios del petróleo en el mercado, que afecta a Venezuela, Ecuador y Bolivia e impide a sus gobiernos revolucionarios contar con más recursos para impulsar el desarrollo de sus pueblos.

Dijo que al no dar más recursos a los pueblos por vía del Impuesto Directo a los Hidrocarburos (IDH) por esa razón, se generó descontento en algunos sectores de la población que no se dieron cuenta de que no es el gobierno el que les redujo esos dineros, sino el imperio con su estrategia de debilitamiento de los Gobiernos que son contestatarios al sistema capitalista e imperialista.

El mandatario boliviano enfatizó que el contraataque de Estados Unidos se produjo después de que se dispuso la nacionalización de los hidrocarburos en cuyo sector operaban empresas transnacionales que lograban importantes lucros a costa de los recursos naturales del país.

“Solamente entregaban al Estado 18 por ciento del 100 por ciento de los recursos generados en base a disposiciones aprobadas por los gobiernos neoliberales, además se consideraban dueños de los recursos naturales cuando salían de la tierra. Creían que esos recursos pertenecían al Estado solamente cuando estaban dentro de la tierra”, dijo.

El gobierno de Morales nacionalizó los hidrocarburos el uno de mayo de 2007 y un año después la Empresa Nacional de Telecomunicaciones (ENTEL), que estaba en poder de un consorcio italiano que exigió el pago de una indemnización e inclusive planteó un arbitraje internacional que no prosperó.

“En lo que se refiere al petróleo el imperio hizo bajar los precios del petróleo mediante el mecanismo de la OPEP que responde a esos intereses para afectar al movimiento popular en Bolivia, Venezuela y Ecuador. Son estrategias planificadas del imperio para provocar desgaste de Gobiernos al impedirle dar los recursos suficientes para el desarrollo a las Alcaldías o Prefecturas”, agregó.

Los presidentes de las naciones integrantes de ALBA se reunirán en la ciudad de Cochabamba los próximos 16 y 17 de octubre con el fin  de adoptar decisiones en los campos político, económico y social a ser implementadas bajo el espíritu de la complementariedad y la lucha contra la pobreza.

Morales confirmó que el primer presidente que llegará a Cochabamba será el de Ecuador, Rafael Correa, el jueves, con el fin de visitar un centro minero. Se ha previsto que los demás mandatarios lo hagan el viernes.

De acuerdo con la agenda, los ministros de los países de ALBA de diversas áreas comenzaron a arribar el miércoles para analizar las propuestas y entregarlas a los cancilleres que prepararán el informe general que será analizado por los presidentes los días viernes y sábado.

El encuentro Presidencial concluirá con una masiva manifestación de movimientos sociales que se celebrará en el estadio Félix Capriles de Cochabamba, que tiene una capacidad de aproximadamente 30.000 espectadores.

Durante la reunión Presidencial se producirán encuentros bilaterales para analizar las relaciones y acuerdos económicos complementarios y algunos asuntos de interés general. No se ha descartado que los presidentes de Bolivia y de Paraguay, Evo Morales y Fernando Lugo, respectivamente, aclaren las dudas existentes en el vecino `país sobre un supuesto armamentismo boliviano.

acl                            ABI