Es lo que dejaron los últimos compromisos de los representants tucumanos en el fútbol argentino.Atlético Tucumán fue vapuleado en Rosario y San Martín prendió velas por el empate.
Ningún decano esperaba semejante derrota y muchos santos agradecieron cuando terminó el partido.
Atlético Tucumán llegó a Rosario con un sabor amargo luego del empate con Lanús, en un partido que le fue favorable, en resultado, hasta los 35 minutos del segundo tiempo. Todos sabemos lo que pasó después. Pero ahí , en ese partido se encendió, a mi entender, una luz amarilla en el funcionamiento del equipo. Esa luz de precaución tiene estos interrogantes : ¿ El trajín de la primera le está quitando piernas?. ¿ El poner tres delanteros no sirve? ¿Sin enganche los decanos bajan rendimiento? .¿ La defensa es lenta?.
Pude observar que en el segundo tiempo varios jugadores bajan , obvio, el ritmo y los cambios se hacen tarde. En el segundo periodo con Newell´s, incluso con Lanús, se notaban grandes diferencias en las pelotas divididas, tanto en potencia como en preparación física de los rivales, eso por un lado. Salir sin enganche o con Juan Pablo Pereyra retrasado hace perder potencia ofensiva. Además el Pulguita, está, parece, en otra cosa. Tendrían que entrar desde el arranque Sarría o Matías García. A la falta de un enganche como los nombrados solo puede generar juego en el medio Pereyra, excelente jugador, pero los técnicos rivales también ven videos. Ahora por el lado de la defens , se está notando la falta de cintura de los centrales, porque frente a jugadores hábiles pierden con más frecuencia que la normal. Encima Longo o Montiglio vuelven despacio o desconcentrados, sobre todo el mendocino.
La derrota ante los rosarinos, seguramente sirvió para hacer una profunda autocrítica. Hasta el momento la campaña de los decanos tiene más de marketing que de solidez. Está en zona de descenso directo, aunque falte mucho todavía, es preocupante y solo consiguió un triunfo ruidoso ante Boca. Nada más.
Por el lado de San Martín la situación es un poco más optimista, si bien es cierto que el equipo de Ferraro todavía deja muchas dudas, se va consolidando, aún si jugar como esperan los cirujas. La defensa muestra , por momentos, fallas garrafales, la sociedad Herrera Álvarez no tiene reemplazo y el retroceso , del equipo cada vez que está en ventaja, alarma a todo el cuerpo técnico ( quizás son los que dan esa orden) y a sus seguidores. Lo positivo, de este San Martín, es que en todos los partidos convierte goles y lo negativo es que en todos le hacen goles. Entonces no debería retroceder tanto y entregar pelota , espacios y juego a los rivales cada vez que se pone arriba en el marcador. En la división, con un fútbol mediocre, hay mucha paridad y las ventajas otorgadas se convierten en dolores de cabeza.
Difíciles compromisos los que vienen para los dos grandes del norte argentino. Atlético Tucumán, con apenas 7 puntos, juega con Banfield que está invicto , tercero en la tabla con 15 unidades y es uno de los candidatos a entrar en algunas de las copas internacionales.
Por el lado de San Martín , el lunes recibirá en La Ciudadela a Platense que viene con técnico, el Beto Pascutti, nuevo y con todas las ganas de salir del penúltimo lugar en la tabla de posiciones.
La mejoría en Atlético es probable. Tiene plantel, buen técnico y mucha hambre de gloria, solo debe dejar algunas individualidades egoístas y retornar al fútbol colectivo. En San Martín su accionar debe ser de un equipo grande y dejar de lado, de local o visitante, el andar cauteloso.
Daniel A. Villalba
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