El canciller brasileño, Celso Amorim, negó que su país analice firmar un acuerdo comercial con Estados Unidos al margen del Mercosur, y declaró que su gobierno estudia la adopción de sanciones económicas contra los norteamericanos, que fueron autorizadas por la Organización Mundial del Comercio (OMC).
"Bajo ninguna hipótesis Brasil entrará en alguna negociación que hiera nuestras obligaciones con el Mercosur", sostuvo Amorim en rueda de prensa junto a Ron Kirk, representante de Comercio de Estados Unidos. Amorim y Kirk, que realiza su primer viaje a Brasil en carácter de secretario de Comercio, se reunieron en el Palacio Itamaraty, sede de la Cancillería brasileña.
"El núcleo del Mercosur es una unión aduanera (sus miembros
importan con los mismos aranceles de terceros países), aunque
ella sea imperfecta, y por eso no hay posibilidad de una
negociación comercial sin el conjunto del Mercosur, Brasil
siempre pidió eso a los otros países" del bloque, declaró el
ministro Amorim.
El enviado del presidente Barack Obama había declarado a la
prensa brasileña que "más que hablar del Mercosur u otro formato
regional, mi propósito es dar más foco a la relación bilateral
entre Brasil y Estados Unidos".
Amorim informó que el tema fue tratado durante su reunión con
Kirk, pero aseguró que éste no le propuso un entendimiento
paralelo al Mercosur.
Sin embargo, el diplomático brasileño admitió que Brasilia y
Washington seguirán conversando en pos de lograr "un acuerdo
marco que nos permita tratar asuntos como inversiones,
transferencia tecnología, propiedad intelectual, queremos un
acuerdo que nos permita aumentar la relación económica".
En ese sentido, Amorim mencionó que se puede aplicar un
formato de convenio con Estados Unidos similar al que Brasil ya
firmó bilateralmente con Turquía y Suiza.
La posibilidad de que Brasil establezca un tratado comercial
con Estados Unidos sin la participación del Mercosur, ha sido
defendida por algunos representantes de la industria de San
Pablo.
Esos empresarios también han mostrado su apoyo a un tratado
de libre comercio entre Brasil y la Unión Europea, sin el
Mercosur.
Amorim y Kirk también analizaron la posibilidad de que
empresas brasileñas se instalen en Haití y desde allí exporten
con un régimen especial hacia Estados Unidos.
El titular de Exteriores dijo que se trata de un tema
esencialmente "humanitario" y que permitirá desarrollar a la
economía haitiana.
Brasil encabeza las tropas de paz de la ONU afincadas en Haití desde 2004.
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