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Dos mujeres reclaman por el derecho a casarse entre si

La presidenta del Instituto Nacional contra la Discriminación (INADI), María José libertino, expresó ayer ante la Corte Suprema su opinión a favor del matrimonio entre personas del mismo sexo.

Libertino se presentó  como "amicus curiae" (amigos del tribunal) en el caso en el que María Rachid y Claudia Castro reclaman que se les reconozca el derecho a casarse.

La demanda tuvo sentencias en contra en primera y segunda instancia y un dictamen de la Procuración General de la Nación    -que se pronunció sobre el tratamiento legislativo del tema- que mantiene las esperanzas de las litigantes. 

"La Corte debe declarar la inconstitucionalidad de la ley de matrimonio vigente, porque constituye una discriminación para quienes, aún del mismo sexo, han elegido compartir sus vidas en pareja", dijo Libertino a la prensa. 

 La titular del INADI acotó que los derechos a una pensión, a tener un bien de familia y a la herencia, son algunos de los beneficios de los que están privadas las parejas de homosexuales que no pueden contraer matrimonio. 

Para Libertino, la posibilidad de constituir una familia también es una "cuestión de dignidad" que debe ser analizada con sentido "abarcativo". 

La funcionaria dijo que con la legislación actual o su falta de reglamentación "se genera una violación continua de un derecho humano, en detrimento un conjunto de personas en virtud de su orientación sexual".