La Paz, 26 jul (ABI) - El ministerio de Minería, Alberto Echazú, destacó el domingo como proyectos estrella del nuevo modelo estatal de producción e industrialización de minerales en Bolivia, los que su despacho impulsa en las salmueras de Uyuni (sudoeste), primer acopio mundial de litio; en Coro Coro (oeste), filón de cobre, y de estaño en Vinto (sudoeste).
"Esos tres proyectos son el avance de los trabajos de investigación de litio, en Llipi, de la producción de cobre metálico, en Coro Coro, y de la construcción de un nuevo horno de función de estaño, en Vinto, sin desmerecer otros como el de Huanuni y Eucaliptos por ejemplo", señaló en declaraciones a la ABI.
Echazú destacó, con énfasis especial,
el proyecto para industrializar el litio, en los salares de Uyuni y
Coipasa, ambos en el andino departamento de Potosí, con una planta
piloto que despega en la circunsvecina zona de Llipi.
"El proyecto más importante es el del litio. La perspectiva es tan
grande que no tiene límites, porque la industrialización de este
recurso prácticamente no tiene parangón", puso en relieve.
"Tenemos un avance importante en la planta de litio, en Llipi.
Hemos subido la concentración de la salmuera en más de 12 veces; eso es
realmente extraordinario", apuntó.
El ministro también subrayó la producción de cobre metálico en Coro Coro, en el departamento de La Paz.
El proyecto "prácticamente ya está en curso" y la "planta concluida".
"Este es un emprendimiento de la Corporación Minera de Bolivia
(Comibol), que puede considerarse entre pequeño y mediano y que
producirá 3.500 toneladas de cobre metálico al año", precisó.
Echazú destacó la labor de captación de desmontes del mineral que efectúan los técnicos de la Comibol.
"Lo bueno es que estamos tratando desmontes y produciendo los
metálicos de alta pureza. Se está recuperando propiamente aquello que
lo habían dejado como un desecho, ésa la particularidad y vamos a
producir cobre metálico de alta pureza", puntualizó.
En Coro Coro, a unos 100 km de la ciudad de La Paz, la minera
coreana Kores acomete, en base de una inversión de 200 millones de
dólares, la producción de cobre en la explotación de un yacimiento a
tajo abierto.
Echazú también destacó, en mayúsculas, "el nuevo horno de fundición en Vinto, en Oruro, de combustión sumergida".
"Este horno es la nueva tecnología para fundir estaño, un honro muy
nuevo con la lanza sumergida que hace un proceso de fusión mucho más
eficiente. Esta planta va a producir, por lo menos, 17.000 toneladas
metálicas al año de las 10.000 que tenemos ahora en nuestra capacidad
instalada", ilustró.
Aclaró que esto permitirá comprar toda la producción de
concentrados en Bolivia tanto de la minería estatal, de la privada, las
cooperativas mineras y empresa de la minería chica.
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