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Honduras: la OEA descarta intervención militar

El secretario general de la OEA, José Miguel Insulza, dijo no estar a favor de “ningún tipo de intervención militar” en el conflicto de Honduras y aseguró que la vía del diálogo continuará hasta que el presidente Zelaya vuelva a su cargo.

Por Melisa Cabo (Washington)

A su vez, afirmó que “no es verdad” la designación del mediador costarricense para apartar a su organismo de la solución.

“No estoy a favor de ningún tipo de intervención militar” en el conflicto de Honduras, afirmó José Miguel Insulza en el "think tank" Inter Amerian Dialogue, adviertiendo se dialogará “hasta que el presidente constitucional de Honduras vuelva a su puesto”.

Respecto a los comentarios referidos a que el presidente de Costa Rica, Oscar Arias, fue designado como mediador por Estados Unidos como forma disminuir el campo de acción de la OEA, el Secretario subrayó que fue él quien le pidió que “liderara la mediación" al considerar que era la mejor opción.

Insulza aclaró que Arias “está negociando como el presidente de Costa Rica requerido por la OEA y por el SICA (Sistema de Interamericano)”.

Y reforzando el rol de su institución, añadió que “la Carta Democrática fue verdaderamente usada y por primera vez funcionó” advirtiendo que a pesar de ello “tendría que ser enriquecida con la experiencia de todos estos años”.

Por otro lado, al referirse a la incidencia de la Iglesia hondureña en el conflicto, Insulza consideró que en algunas intervenciones los religiosos parecían "justificar" el golpe de Estado.

A su vez, Insulza comentó que desde la organización sabían "que la violencia aumentaba” en las semanas previas al golpe, por lo que mandaron un enviado del organismo a dialogar con el presidente Zelaya.

El titular de la OEA consideró que “hay buenas señales” para la próxima mediación que el mandatario de Costa Rica llevará adelante entre Roberto Micheletti y Manuel Zelaya.

Sin embargo, aclaró que “la paciencia del presidente Arias no es infinita, por lo tanto en un momento determinado si cree que esto no vale la pena, me lo va a informar y va a dejar de tratar con ese esfuerzo”.

“Los presidentes quieren ver la Constitución reestablecida y no hay otras opciones”, remarcó.

“No tenemos todo el tiempo del mundo y un escenario que no queremos tener es el de un presidente de facto”, finalizó Insulza.