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AMPLIAREn el Macro ubicado en Maipú 70 la fila era interminable

Por presión del público los bancos extendieron su horario

Las colas eran interminables. Algunos tucumanos esperaron entre dos y cuatro horas en la cola para ser atendidos. Las entidades crediticias permanecieron cerradas jueves, por el 9 de julio, y viernes, con el objetivo de prevenir la pandemia por la gripe A. De esta manera los servicios vencieron ayer y la gente se agolpó a pagar, o en otros casos a cobrar.

Una jornada para el olvido.

De esta manera los vencimientos de los diferentes servicios que estaban previstos para el 10 pasaron para ayer. A esto hay que sumarle las extracciones habituales de dinero, pagos a jubilados y planes sociales, y la lista es larga.

Las colas de espera desbordaban las veredas de la city tucumana, por ejemplo la del Banco Macro de calle Maipu superaba las dos cuadras de largo. La situación se repitió en todas las entidades crediticas. En una hora solo se avanzaba unos pasos ya que dentro de los edificios otra marea humana esperaba realizar las transacciones. Los tucumanos comenzaron a llegar desde muy temprano y se fueron tardísimo.

“Entré a las 12 y salí a las 4 de la tarde del (Banco Macro). Cuando me fui la cola en la calle era igual que cuando entré”, comentó a TucumánHoy, Susana Costas de 46 años.

Alrededor de las 13.30 los guardias señalaban al último de la fila. Pero había tanta gente que a las 18 todavía, las cajas seguían atendiendo.

De esta manera para muchos coprovincianos la jornada de ayer fue realmente para el olvido.

Sebastián Ganzburg