La Universidad Nacional de Tucumán (UNT) lanzó un plan de contingencia para los 28000 afiliados a la obra social universitaria, Asunt. El anuncio estuvo a cargo de la vicerrectora, María Luisa Rossi de Hernández, y de Gerardo Rea, presidente de la Acción Social, junto a médicos especialistas.
Las acciones incluyen la apertura de “centros de fiebre”, que funcionarán en el Centro Marchese (ubicado en Ayacucho 43) y en el Centro Alvarado (del Centro Prebisch, en Benjamín Aráoz al 800), para atender a los pacientes que tengan este síntoma. “El lunes se habilitará una línea telefónica gratuita para atender consultas”, adelantó la Vicerrectora.
A partir la semana próxima se enviarán instructivos al domicilio de los 7800 afiliados titulares, explicó Rea, quien también indicó que la obra social finalizará su atención a las 14, mientras que la farmacia lo hará a las 16. “De todas maneras, poseemos convenios con casi todas las farmacias”, aseguró.
Las autoridades recomendaron a la población universitaria abstenerse de concurrir a centros médicos de cualquier tipo, a menos de que se trate de una emergencia. “No se trata de entrar en pánico sino de ser responsables. Higienizarse las manos con alcohol, al igual que los elementos compartidos, y si se está enfermo aislarse para no contagiar”, expresaron.
Expertos
La UNT también creó un comité de expertos, que trabajará en consonancia con las autoridades provinciales. Está integrado por el infectólogo Humberto Musa, el sanitarista Narciso Kestelman, por la Facultad de Medicina, y por Bioquímica, Química y Farmacia: Guillermo Recúpero, Susana López de Caillú y Ana María Zamora de Raya.
El lunes, a las 12, el Comité brindará una conferencia a los medios de comunicación para evacuar dudas sobre asistencia y prevención.
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